17.3.16

Europa necesita ayuda. Para ser más humana

Ayer salimos a la calle para decirle a europa que con los desplazados por la guerra y el hambre no se puede jugar con las fronteras. No se nos escuchó. Mariano Rajoy salió a explicar lo que todos nosotros decimos siempre, que en política internacional no se van a saltar la ley internacional, y esto viene a sumarse a la lógica social de que los seres humanos siguen siendo seres humanos aunque no estén dentro de nuestras fronteras artificiales.

Trasladar seres humanos desde Grecia o Macedonia a Turquía previo acuerdo económico me suena a venta de seres humanos. A otro desplazamiento más de personas por la putas guerras que no somos capaces de evitar. Dentro de unas décadas todos dirán que esto fue una barbaridad, siempre lo decimos. Siempre tarde. Siempre para quedar bien. Siempre diciendo que no lo habíamos visto.

Si los políticos son miopes o cortos de vista para los temas sociales, no sirven como políticos, pues un político es el que gestiona la sociedad. Decir que no lo vieron, que no lo sabían es tanto como asumir que eran o siguen siendo tontos de baba. En las empresas privadas a los tontos de baba se les expulsa de la gestión. No se enteran de Valencia, de andalucía, de Grecia, de Siria, de nada que suponga ser simplemente cristianos básicos, seres humanos simples. Que nos gobiernen los más tontos, los más jetas, los más cegatos, es un gran problema que pagaremos todos.

15.3.16

Nos tratan como a imbéciles borregos

Estos políticos reflejados en la viñeta de Ferreres los conocemos. Intentan emular los cuadros y grabados de Goya, martirizando a un animal, que en realidad somos todos nosotros. Se nos ríen en la cara, tienen los bemoles de salir en ruedas de prensa a explicar lo vergonzoso, creyendo ellas y ellos que nosotros somos imbéciles de baba. Nos tratan peor que a los toros heridos, nos tratan como a su alimento. Se nos comen con babas y se chupan los dedos creyendo que además de ser los mejores son los únicos que tienen “venia” para falsificar a la sociedad con sus pensamientos asquerosos. Muchas veces están mejor calladas y callados, pero sus tripas les piden seguir jugando con nosotros.