El teatro de la vida

Todos somos pequeños actores en este teatro de la vida, no sabemos bien cómo es la función, ni cuando termina, ni cuando hay descanso, simplemente actuamos al compás de los que nos acompañan, al ritmo que nos marca la propia obra que nos envuelve.
Somos actores de reparto, iluminados por luces de colores que nos diferencian del resto, que no siempre podemos imprimir a nuestro personaje un sello personal, pues la obra en su conjunto sigue avanzando sin nuestro control.
Somos bueno o malos actores sin importar mucho nuestra interpretación al conjunto de espectadores, porque todos somos actores. Nadie aplaude, todos miramos e intentamos hacer lo mejor que podemos nuestra particular obra.
Seamos al menos buenos profesionales en nuestra forma de entender la obra, seamos humanos para así ayudar a los otros humanos.

¿Qué es el ARTE?

El ARTE es enseñar a los demás, al mundo, tu propia visión de los objetos, de las palabras, de las situaciones, de las formas.

El ARTE necesita complicidad, da igual si es entendida o no, entre quien crea y quien observa, quien trabaja y quien disfruta, quien motiva y quien es motivado.
El ARTE es crear algo único, desde una visión o un encuadre a un objeto o unas formas o unos contrastes. Algo único e irrepetible, no porque no se pueda copiar, sino porque no se quiere copiar.
Todos miramos, observamos, pero pocos saben ver y elegir, encuadrar y separar del conjunto, mostrarnos a los demás su propia visión de la sección del todo que ellos desean.
Esos son los artistas. Los que limpian y separan, los que eligen y encuadran, los que dan vida a algo que no existe y nos lo enseñan limpio y sin estorbos.
No es tan difícil ser artista, eso si, ser un buen artista es muy laborioso y hay que tener un brillo especial en los ojos.