25.12.24

El Mensaje del Rey, hijo de Rey


El mensaje navideño del Rey Felipe VI en esta Nochebuena de 2024 ha marcado un punto de queja que casi nadie quiere entender, escuchar, reflexionar. Es lo que nos toca cuando todos estamos cabreados.

Advierto para quien tenga dudas que yo no soy monárquico, lo que no me impide entender desde mi punto de vista, lo que creo correcto o incorrecto. Y el Rey actual hizo lo que se le esperaba, pedir calma.

Repitió media docena de veces al menos, las palabras "El bien común" que es vecino del "Sentido común" y una frase que se lleva bastante mal con la actual situación en España. Admito sin dudar, que en otros países están bastante peor. Pero eso es consuelo de tontos.

Deberíamos hacer todos y desde todos los oficios, un esfuerzo para entender qué significa "El bien común o para la comunidad, o para todos" a diferencia de la crispación, la utilización de la Justicia para jugar a joder, el no querer entender nada en clave positiva.

No digo que no se estén haciendo cosas mal, lo que digo es que como se explican mal para provocar, se aumenta la crispación y la violencia verbal, incluso entre amigos y familiares, que si bien es una constante en estas fechas, si le añades gasolina, todavía es mayor.

El Rey es hijo de otro Rey de complicado recuerdo. Esta misma semana han vuelto a salir a la luz grabaciones, datos, que como poco fotografían la historia. Y ser hijo de aquel y haber sido educado por aquel, complica la serenidad de cualquiera, la credibilidad de quien sufre esas mochilas.

Pero eso no tiene nada que ver con los mensajes de calma, de sentido común, de bajar el tono y las velocidades…, o iremos a peor. Podemos seguir eligiendo esos tonos en la vida corriente, todavía somos libres, todavía vivimos en un país maravilloso.

21.12.24

Atentado en la ciudad alemana de Magdeburgo


El atentado en la ciudad alemana de Magdeburgo es otro ejemplo de que hay que tener mucho cuidado con los extremismos en todos los espacios públicos, pues reflejan personalidades y peligros para todos, que solo se puede minimizar desde la autodefensa de esos espacios. Solo se necesita un loco asesino para trastocar unas fiestas populares.

El hombre de 50 años, nacido en Arabia Saudí y que llegó a Alemania en 2006, mientras residía y trabajaba en la localidad de Bernburg, a unos 50 kilómetros de Magdeburgo, era ya conocido por diversos servicios secretos, pues difundía en las redes sociales mensajes conspiracionistas, según los cuales Alemania trabajaba en favor de la “islamización de Europa” y perseguía a los refugiados saudíes.

Parece ser que este hombre también expresaba simpatía por el partido de extrema derecha Alternativa para Alemania y por Elon Musk, el propietario de la red X y aliado de Donald Trump.

En apariencia no era un terrorista que actuara a favor del islam, sino como dijo en una entrevista: “Soy el crítico del islam más agresivo de la Historia”, desde un radicalismo atípico y posiblemente aunque con una inteligencia alta, dentro de ciertos problemas mentales complejos de descifrar.

Su último mensaje de voz en Redes intenta explicar lo inimaginable: “Hola, mi nombre es Taleb Al Abdulmohsen, Soy doctor psiquiatra, trabajo en Alemania. Esta historia comenzó hace mucho tiempo, al menos hace 2.400 años, cuando los atenienses ejecutaron a Sócrates por su crítica de la religión. Y hoy día, los descendientes culturales de los antiguos griegos son Europa y Norteamérica. Y actualmente en estos países la nación que activamente y criminalmente persigue a los críticos con el islam para arruinar sus vidas es la nación alemana. Por eso considero a la nación alemana responsable del asesinato de Sócrates.”

Hay que estar muy pendientes desde los Servicios Secretos occidentales de cualquier atisbo de violencia verbal que pueda degenerar, pues la única manera de defendernos desde el mundo contra el terrorismo son la Inteligencia y sus modelos de defensa.

No es la primera vez que se ataca en fechas cristianas, contra grupos de gente totalmente ajenas a estos problemas. Y a veces los ataques pueden venir desde mentalidad complejas de comprender en sus intenciones.