1.8.23

El Movimiento SUMAR debe reflexionar


El Movimiento Sumar, o SUMAR como partido político
tiene ante sí un gran reto que debe encarar en las próximas semanas, sin prisa pero sin pausa, en una Asamblea Constituyente tras el verano, que decidirá qué quiere ser de mayor. Imprescindible esta reflexión general y de muchas aristas.

Es hoy la izquierda al PSOE, y de eso no hay duda aunque a ciertos políticos que tuvieron las riendas de Podemos esto no les gusta nada por lo que representa de enterramiento. Pero las ocasiones las pintan calvas, y eso vale para todos, incluido SUMAR.

Hay que diseñar y abrazar un espacio ideológico claro, moderno, propio, abierto y a su vez delimitado. 

La sociedad castiga a los que no saben bien dónde están o a los que un día están en un lugar y otro día en otro parecido. Las similitudes en política se pagan caras. 

SUMAR debe ser un partido político, nacido de un Movimiento Político, que debe tener un conglomerado de Fundaciones Políticas NO AL USO, abierto al diálogo inteligente y muy conocedor de la sociedad a la que representa, o quiere representar.

La gran ventaja de SUMAR y de los al menos ocho Grupos importantes que configuran el Movimiento Sumar es que ya saben en donde se suelen producir los errores, las debilidades, las desconfianzas, las pérdidas de valor

Y si lo saben, sería de una torpeza suma no aplicarlo en la construcción de una nueva oportunidad.

En cualquier construcción válida de una empresa, es decir de un proyecto, se requieren siempre unos elementos básicos. Un liderazgo, una idea o ideología, unas bases que hagan de suelo común y una capacidad clara de formar equipos

Y todo eso mezclado con una capacidad de diálogo casi infinita, con unos deseos de saber explicar, de querer comunicar en fases y en diversos escalones, de no tener miedo a ser claro y abierto.

SUMAR ya tiene bastante de lo que en teoría se necesita. Es cierto que no será sencillo levantarlo, asentarlo y ponerlo a funcionar hacia los objetivos que se necesitan, no para ellos sino para la sociedad española.

No tienen que existir cuotas de poder que vengan del pasado, sino cuotas de poder que aspiren a tener el futuro, a construir espacios de reflexión y convivencia no entre unos pocos sino entre toda la sociedad que desee escuchar. 

Los equilibrios internos para no romper nada serán grandes, inevitables. Pero posiblemente será la última ocasión de formar una Izquierda a la Izquierda, respetada, necesaria, capaz de trabajar y gestionar para todos.

Julio Puente Mateo (Ajovín)

30.7.23

¿Segundas Vueltas nunca fueron buenas o malas?


Tras el recuento final del voto CERA en España, todo ha cambiado aunque nos parezca que no. El silencio que observamos viene impuesto por las vacaciones de final de julio y principio de agosto, y cuando no hay periodistas ni políticos con ganas de añadir nada nuevo, parece que no existe nada nuevo.

Los dos Diputados que han cambiado aumentando uno al PP y disminuyendo uno al PSOE complica de tal manera la gobernabilidad futura, que lo lógico ahora es pensar en una nuevas elecciones Generales. Hay pocas, muy pocos opciones para evitarlo.

Ni los catalanes de JUNTS lo van a poner posible, ni creo que sería interesante un acuerdo con ellos por la fuerza que eso representaría ante la debilidad de un Gobierno sin ya ninguna alternativa para negarse a nada. 

Una cosa es necesitar el apoyo puntual de la suma de diversos partidos, lógico en democracia, y otra estar pillado en exclusiva por uno de ellos sin posibilidad de poder tan siquiera negociar. Se impone también el pragmatismo no del hoy, sino de todos los días de los próximos años.

No cabe en este año 2023 llegar a ningún acuerdo entre el PP y el PSOE, tal vez algo que sería posible en el 2024 si todo continuara igual. La estrategia política nos indica que sería un error para los dos partidos y posiblemente una bendición para los demás.

Hay una opción que España nunca ha explorado que sería un Gobierno técnico, que en algunos países se ha realizado on desigual resultado y casi siempre con resultado negativo. Un Gobierno con políticos del PP y PSOE peo sin sus figuras políticas más reconocidas. Personalmente creo que es pan para hoy y hambre para mañana.

No hay que perder los nervios, hay que entender que lo que también se conoce como Segunda Vuelta obligada puede ser una solución sencilla aunque no guste ni al PSOE, al PP, ni a VOX o Sumar. Tampoco a los catalanes. Pero los importantes en estos casos somos los ciudadanos.