22.7.23

Consejos para conseguir aumentar amistades

Buenos días o tardes o noches 
¿Qué tal estás hoy?

No sé quien eres, y sí, me importa saber quien eres y cómo has llegado hasta aquí. No está nada mal conocer a l@s lector@s, saber que tal se encuentran, que dudas o problemas tienen, qué felicidades les embargan.

El título de la entrada hablaba de hacer amistades, algo que por desgracias necesitamos todos cada vez más pues tras la pandemia se nos han caído opciones de calidad de vida, aunque en apariencia no se note mucho.

Yo estoy de manaña fresca con pocas ganas de hacer nada, aunque cuando me leas no tengo ni idea de cómo me encontraré. Tampoco sé cómo estás tú, espero que tranquilo. Pero el tiempo todo lo modifica. 

No tengo hoy muchas ganas de casi nada, pero espero mejorar, creo que me iré de compras con la familia y luego les cocinaré una paella de pollo con alcachofas, pero poco más.

Tener familia cerca es una garantía de no estar solo, de disfrutar de compañía. Pero si no se tiene familia hay que inventársela. Presencial o virtual. No hay otra.

Buscar amigos o amigas en las Redes no es lo mejor, pero si no hay otra cosa es útil, funciona. Saber qué dicen cada día, hacerte una idea de cómo son, interactuar con ellos.

Me importas como lector porque si has llegado hasta aquí es porque buscas un espacio para leer que es plural aunque no siempre lo parezca, buscas relación sencilla con un espacio y con unas ideas. Quieres aumentar tus amistades.

Yo solo soy un tipo en busca de lector@s, simples lectores, porque es el combustible de este lugar. No busco nada más que no sea hablar escribiendo. Simplemente hablar aunque sea tecleando. Pero casi todos los días dejo algo nuevo. La mitad no te gustará nada de nada, pero espero que la otra mitad te parezca un poco interesante.

Que pases un buen día y gracias por acercarte por aquí.

21.7.23

Ahora sacamos el Neocomunismo. Qué poco trabajo tienen

Es curioso que el señor que ponía los pies sobre la mesa del Presidente del Mundo, en aquella reunión entre Aznar y Bush en donde se repartía el mundo a base de crear guerras con equivocaciones (uff) diga ahora que Yolanda Díaz es NeoComunista, y lo diga como un insulto.


Igual hay que empezar a explicar lo que significa Neo cuando se añade a cualquier palabra. Neo significa Nuevo. Y a continuación igual hay que definir qué era el comunismo viejo, el comunismo de aquellos años en los que entre los comunistas italianos, franceses, griegos y españoles del siglo XX crearon el eurocomunismo, para terminar imaginando que lo malo de los NEO no es lo que viene como nombre a continuación, sino en los que cambian de las viejas ideas para que sean totalmente distintas.

Un comunismo nuevo no tiene que ser un comunismo que se parezca mucho o poco al comunismo viejo. De hecho un Catolicismo NEO no se parece en nada a un Cristianismo (de donde proviene) que creó Jesucristo.

Por ejemplo El Yunque, conocida también en España como Organización del Bien Común, es el nombre de una organización paramilitar secreta y ultracatólica que dice que su misión es poner el Reino de Cristo en la Tierra. 

No tiene nada que ver con el Cristianismo viejo, el de Cristo. Si hay dudas de por qué saco El Yunque en estas líneas, pues eso, os lo podéis imaginar. Si hay dudas de su ideología, buscarla en Wikipedia.

Que Podemos o Sumar reciban el título de Neocomunistas por parte de gente del Opus es un detalle que sin un debate serio no tiene mucho sentido. A la sociedad hay que explicarle mucho más los temas…, si queremos no engañarlos.

El comunismo suave de Pepe Mújica no tiene nada que ver con el comunismo viejo de Rusia. Los comunistas franceses, italianos o españoles ya declararon hace varias décadas que no tenían nada que ver con el comunismo de la URSS. 

Tampoco el socialismo actual sigue las líneas teóricas del socialismo de hace un par de siglos, cuando el comunismo y el socialismo estaban muy cerca y se intercambiaban los nombres.

El mundo de principios del siglo XIX no tiene nada que ver con el mundo del siglo XXI. Y las ideas, las ideologías, las economías nunca pueden ser iguales, pues todo ha evolucionado tanto en estos más de dos siglos, pero tanto de tanto, que lo de menos es el nombre como insulto que le pongamos a lo que hay ahora.

Ser comunista no es tener rabo rojo y peludo por detrás, no es regalar caramelos envenenados a los niños, no es odiar a las religiones, no es repartir lo de todos a todos. 

Yo no seré comunista, pero me fastidia que se intente engañar con nombres manipuladores a la sociedad. Lo malo no nos los nombres sino las decisiones y los hechos.