29.8.20

Más allá del olvidar. Una película argentina de 1956


"Más allá del olvidar" en recuerdo a una película argentina titulada "Más allá del olvido" y estrenada en el año 1956 que trata del amor de un hombre que tras quedarse viudo encuentra a una mujer idéntica a la fallecida y se enamora perdidamente de ella. Pero esta mujer es muy diferente a su viuda, aunque por fuera sean idénticas.

A veces añoramos lo pasado sin pensar que aunque nos parezca incluso mejor simplemente nos lo parece por los ojos con los que lo miramos. Nosotros mismos ya no somos iguales y por eso es imposible ser justos con lo que recordamos, con lo acontecido cuando nosotros mismos gozábamos de una juventud que hoy ya no tenemos.

En recuerdo al cine en blanco y negro, al de los años 50 con nuevas historias y novedosas formas de atrapar al espectador, al director Hugo del Carril y a la actriz Laura Hidalgo, empezamos esta lista de pequeñas miradas antiguas con un recuerdo al Arte Visual de los años 50.

Bien encontrados, queridxs lectores. Hablaremos desde 1950 a 1975


Pivotando sobre el año 1956 —un año especial para mi— voy a intentar mostrar miradas antiguas de los años 50, 60 y 70, buscando esa posibilidad tonta de ir un poco más allá del olvido, no sé si para no olvidar o simplemente pare recordar o para conocer. Depende de las edades de los lectores.

Los años 50 nacen tras una II Guerra Mundial que deja al mundo herido y pobre. En España la pobreza dura más pues a nosotros las cosas malas siempre empiezan antes y terminan más tardes. Está escrito no sabemos bien dónde.

Los años 60 quieren ser ya la nueva normalidad en el mundo, la riqueza repartida, las novedades que quieren conducir a la felicidad para olvidar. Y en España como ya decía antes, eso tarda más y viene más lentamente, para no cogerle gusto a los cambios.

Los primeros años 70 representan en España el deseo, la ventana que se quiere abrir y que espera a que se muera en la cama la Dictadura. Pero también en el mundo suponen la preparación poco a poco hacia el final de siglo, hacia la modernidad, hacia el futuro.

Terminaré mi límite temporal el uno de enero de 1976, esa entrada al futuro sobre todo en España ya sin dictador, y que visualmente ya tiene mucho más color, nuevos personajes y nuevas historia nuevas. Por eso allí me freno antes de entrar en la Transición, pues de ella se ha hablado mucho y bien y lo dejo para otro intento.