2.8.20

No todo el turismo en España es economía para España

Perder en España 80.000 millones de euros en el sector Turismo por culpa de la pandemia, es un drama de incalculables resultados dependiendo de qué solución se intenta buscar. 

Todo lo que no sea intentar imprimir dinero desde Europa es desastroso. Y eso siendo posible no es de momento lo deseable. Todavía. 

No es solo sumar lo que ya hemos perdido en Turismo aunque no esté contabilizado todavía, será también lo que ya no lograremos facturar en los próximos años en todos los sectores cercanos a esta actividad tan importante en España pues esta pandemia ha cambiado nuestras formas de vivir, de movernos, de soportar el miedo económico, y cualquier herida en otros sectores también afecta al ocio, a la cultura y al turismo. 

España debe seguir viviendo del Turismo, por mucho que a veces se tenga dudas sobre eso. 

En el sector Turismo entra la Vertebración de los territorios, la enorme potencia de la gastronomía de calidad, el transporte y el consumo, la cultura y el arte, la moda y el deporte. Mucho más que el simple Sol y Playa. 

Potenciar el Turismo no supone dejar de potenciar a su vez la nueva industria o la innovación y la investigación que España no parece querer liderar. 

España tiene unas condiciones fabulosas para volver a tener un Turismo único en el mundo. 

Sin duda hay que replantearse muchos escenarios del Turismo pasado, para reconstruir el Turismo del futuro. Por ejemplo el Turismo al que debemos ayudar debe ser el Turismo que está en manos de empresas e inversores españoles. Que ni es todo, ni es lo suficiente, ni está bien repartido. 

Si ayudamos a "todo" el turismo no estaremos reconstruyendo una actividad prioritaria que se nos estaba escapando de nuestras economías propias. Y estaremos "dando" ayudas a quien tiene unos objetivos empresariales lícitos pero no estratégicos para España. 

No hay mucho para repartir, así que hay que seleccionar. 

Ni todo el Turismo es igual, ni todo está en manos de empresas o ciudadanos que necesiten ayuda, ni es sencillo reconstruir sin romper jarrones. El riesgo de construir un "nuevo" Turismo dentro de esta "Nueva Normalidad" supone intervenir y seleccionar. 

Saber incidir de forma inteligente en las reformas que son muchas y muy necesarias, no pensando en el 2021 sino en el 2030 como poco.

1.8.20

Enseñar a los niños preescolares sonidos suaves

Lo sabemos todos aunque no hagamos nada por evitarlo. Así que tal vez para los niños pequeños, los que tiene entre uno y seis años, sobre todo entre dos y cinco años, sea el momento de evitar que los ruidos se apoderen de la vida.

Nos sobra ruido, de muchas clases, en muchos sitios. Y al tener tanto ruido nos falta atención hacia los sonidos suaves, agradables. Es posible que incluso de adultos nos sorprenda el sonido de un pájaro. Pero solo se puede escuchar si están envuelto en silencio. Necesitamos el silencio para escuchar los sonidos débiles, suaves, nuevos casi, agradables.

Al niño vamos a hablarle con voz suave, vamos a ponerle la música en tono suave, hable a su hijo al oido como otra manera de dirigirse alguna vez a él. Y pregúntele qué le ha dicho. Jueguen a taparse los ojos y a adivinar desde donde viene el sonido, la voz, la música.

Enseñe a diferencias tonos agudos y graves pero en tono suave. Y a diferenciar las edades de los que hablan, simplemente escuchando con los ojos cerrados. El sonido también debe poderse escuchar en tono suave, para poder diferenciar todos sus brillos.