11.12.19

El futuro de España está desértico. Zaragoza año 2100

Como españoles nos estamos muriendo, pero tranquilos que no es ni el efecto catalán ni el clima ni las bombas sucias, nos morimos simplemente porque no nacemos. 

En España nacemos —según las estadísticas— con el dato muy malo de 1,6 niños por pareja, así que o inventamos algo para que los hombres puedan tener hijos o esto se nos hunde y en un siglo más ya no quedarán españoles de apellido, seremos un desierto vacío excepto en las costas donde habrá muchos extranjeros tomando el sol y muchos extranjeros sirviendo a los otros extranjeros.

No me tendría que preocupar pues yo no lo veré, pero me entretiene saber que después de mi, ya pocos más. Que mi ciudad quedará algún día desierta o invadida por los chinos o senegales, que casi sería lo mejor, para no tener que perder tantas calles y edificios tan bien construidos.

Ahora queréis tener hijos a partir de los 30 años creyendo que a esa edad los trabajos ya son más seguros. Y claro, el segundo en muchos casos no llega y si no llega el segundo no salen las cuentas. 

Que lo entiendo, repito, que incluso me da igual. El problema de las pensiones no será que no haya dinero, es que tampoco existirá consumo, sociedad, y todos los españoles seremos un poco como Libia o la zona del Atlas, mucho barro, arena, algunas ramas de arbustos dando vueltas, y oasis con algunas tiendas.

Joder con los datos demográficos. ¿Quién los mide? ¿No podrían disimular un poco?

Lo malo es que además están logrando que cada vez vivamos más años, que estemos viejicos eso si, con lo cual vamos incluso a ver parte de todo este tinglado, desde las residencias de ancianos cochambrosas y llenas de polvo pues no habrá nadie que las pueda limpiar. Bueno sí, chinos y senegaleses. Menos mal.

Se cerró permanentemente. Pero nunca se sabe

Algo cerrado permanentemente es algo más que muerto, es algo que ya no existe, que nunca más tendrá sentido, que se ha perdido incluso el recuerdo. 

Permanentemente es el deseo de olvidar que ha existido. Es la nada. 

Pero bien mirado… no tiene sentido un cartel tan bien diseñado en la puerta de un local comercial advirtiendo que ahora ya… estaba cerrado permanentemente. Hubiera sido más lógico no poner nada o escribirlo a rotulador de mala hostia. No sé.