20.11.18

La Falange y la División Azul, reinan en Zaragoza

El ejemplo de lo que ha logrado la Falange Española y de las JONS (Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista) imponiendo durante unas horas un manto a la Virgen del Pilar de Zaragoza, donado en los años 40, es la constatación de que algunos en esta santa España, además de añorar los años violentos de la dictadura, quieren poco a poco imponernos sus formas de pensar por la vía de los hechos escondidos.

La Transición no ha terminado, mientras no seamos capaces de terminar con este tipo de actuaciones. Nadie sería capaz de soportar en Alemania o Italia un acto de esta naturaleza que quisiera alabar las virtudes de un partido político que llevó la muerte y las dictaduras. 

En las redes sociales se llamó el día anterior a la presencia en El Pilar de sus fieles falangistas y se sigue hoy alabando la acción, premeditada y no casual o por error. España debe mejorar el cuidado de su democracia todavía débil, 43 años después de lograrla.

En el año 2015 lograron sacar a la Virgen del Pilar con un manto de la División Azul, el ejército de voluntarios españoles que se incorporaron al ejército nazi alemán. ¿Hasta cuando este descontrol?

Carlos Azagra desde Zaragoza contra el poder

Esta viñeta, publicada por Andalán en diciembre de 1975, refleja claramente los tímidos movimientos que se podían realizar al final del franquismo, para intentar reunirse y hablar de todos los problemas que preocupaban a la cada vez más concienciada sociedad española, que levemente empezaba a exigirse más implicación en la vida social de España.

Y los intentos surgen desde algunas iglesias, formando lo que se llamaban Asociaciones de Cabezas de Familia, que peleaban por los barrios, pero que en su seno se hablaba de política en mayúsculas, de huelgas laborales para la dignidad de los trabajadores, de libertad y de dictadura.

La viñeta de un muy joven Carlos Azagra, miembro del Colectivo Zeta de Zaragoza, donde se habla de todo eso, sin hablar de casi nada.