Caer es más fácil de lo que nos pensamos. Y si no que se lo pregunten a Mario Conde. Pero contra cada caída siempre hay un “levantarse”, sobre todo si hay rasmia, hay formación detrás, hay valor y energía conservada. Caer no es un drama si somos capaces de saber levantarnos y tras limpiarnos del polvo, seguir subiendo o bajando, seguir caminando. Pero caer es también aprender. Si no somos capaces de aprender tras una caída, no nos va a servir de nada y se habrá convertido en negativo. Caer es una gran experiencia vital, y no hay que preocuparse del dolor de la caída —ese se va rápido—, hay que preocuparse de aprender a no volvernos a caer, a que hay que andar más seguros. Muchas veces caemos por tonterías, por egoísmo desmedido, por abusos y exceso de confianza. No es complicado aprender de los errores, no es nada difícil darse cuenta de qué motivos nos han llevado a la caída. No sólo hay que evitarlos, sino aprender a no acercarnos a esos caminos del error.
12.4.16
11.4.16
La importancia de relajarse para ser eficaces
Sabemos que relajarnos es muy importante para estar mejor, pero sobre todo para hacer más y lograr de forma más sencilla nuestros objetivos. Es decir, relajarnos no tiene efectos secundarios y siempre es positivo. La duda es saber cuál es el motivo para que no aprendamos bien a relajarnos, para que dominemos nuestros nervios, cuando admitimos que siempre es mejor. Incluso cuando hay que cabrearse.
Nada fastidia más al contrario que esperar que ya te tiene violento e irascible, y ver que estás tranquilo y relajado, hablando de forma lenta y calmada, ofreciendo alternativas lógicas y demoledoras. Se puede estar relajado y ser muy eficiente.
Hay pues dos formas de entender la relajación. La pasiva, para tranquilizarnos y sentirnos mejores, y la activa demostrando que estamos relajados y tranquilos, que ya venimos relajados de casa.
Relajarse además es gratis, es sencillo, lo podemos hacer sin la ayuda de nadie, lo podemos demostrar enseguida y a todos, es eficiente y por si hay dudas, se aprende.
“El momento para relajarnos (cuando más lo necesitamos) es cuando no tenemos tiempo para hacerlo”
Más o menos, una frase de Sydney J. Harris
Suscribirse a:
Entradas (Atom)