24.1.15

Vuelve Aznar. Que se preparen Rajoy y las encuestas

Como amigo este blog de analizar los ejercicios de comunicación política, debo reconocer que pocos discursos en los últimos meses —por no decir años— han sido tan de libro, tan bien estructurados, tan de estadista popular y populista, tan beneficiosos para sus propias ideas, que el realizado por José María Aznar ayer en la Convención Nacional del PP.

Aznar ha vuelto aunque él diga que no, sabiendo que cambia sus palabras para seguir estructurando un nuevo proyecto. Ha vuelto sin saber tan siquiera si le van a dejar entrar, pero ha vuelto hablando, explicando, diseñando el futuro que ellos ven para España, empleando la pedagogía política y social aunque sea la suya, diseñando un diagnóstico de España y del Partido Popular y lo que es más importante recetando todo un gran listado de fórmulas magistrales para curar los trastornos y las enfermedades más graves.

Queda claro que a Aznar le creerán de entrada solo parte de los suyos, otros desde dentro ya le odian desde hace tiempo, y que su discurso solo busca amplificarse para que cale en la sociedad que lleva años escondida en la miseria y sin oír un discurso conservador que sirva para algo. Ha vuelto Aznar con todas las de la Ley y espera que los gritos de los medios le reclamen como el Gran Salvador. Solo remarcar dos frases que harán las delicias de los actuales dirigentes del PP que se están rascando las legañas para despertarse.


¿Dónde está el Partido Popular?
¿Aspira realmente el Partido Popular a ganar las elecciones?

Pero Aznar no solo da consejos al Partido Popular y a toda España. Bueno es él como para quedarse solo en eso, tras saber —e insistir sin que se note— que la filosofía Popular pasa por ser el Padre protector que ayuda a todos los que tienen problemas desde el orden y la Ley. Suena cojonudamente pero es la filosofía que sirve para que los ricos sean más ricos y los pobres más pobres, no hay que caer en las trampas filosóficas bien diseñadas desde hace siglos. Todo esto es de libro, de Primero de Políticas. Pero sigamos.

También dio diagnósticos para la izquierda en plan consejo y como amigo y deseoso de tener rivales dóciles contra los que ganar. Y nos mostró su idea de lo que realmente sucede en la izquierda, que viniendo de él resulta además de bastante cierta, para coger con detenimiento y hacerla caso. Y no lo digo con sarcasmo.

¿Quién ofrece para España un proyecto creíble, en el que confiar y que pueda ser útil? No lo tiene la izquierda que está dividido en tres: los que han decidido hundir su propio barco, los que están en la inopia y lo populistas. A todos se les cayó encima el Muro de Berlín y a algunos se les va a caer ahora los cascotes del fracaso del chavismo

En realidad en esta frase está contenido todo el mensaje de ataque que el Partido Popular va a dirigir contra la izquierda española en las próximas citas electorales. ¿Sabremos desde la izquierda defendernos?

Parecemos atados a Madrid y Sevilla. ¿Y el resto?

El trabajo de fontanería política de Susana Díaz contra Pedro Sánchez la imposibilita para ser Presidenta de Gobierno de España. En todos los partidos políticos hay fontaneros, es una figura necesaria incluso, pero siempre se elije para ello a uno de entre los más listos pero que nunca quiera aspirar a gobernar la institución mayor. Es incompatible trabajar desde dentro de la fábrica de trampas y querer además tener prestigio para gobernar desde los lugares donde hay mucha luz.

El trabajo de Susana Díaz está bien que lo haga ahora Zapatero, pero ya es tarde pues se ha notado la trampa de los cubiletes. Lo de menos es que lo haya notado el votante del PSOE, menos el afiliado del mismo partido pues ya sabe que los fontaneros existen y son necesarios, pero una vez que sale a la luz las trapas de las cloacas, es muy complicado apagar la luz. Les hemos visto la cara a todos y sabemos qué tipo de pasamontañas emplean.

Al PSOE le deberían haber recetado mucha calma, sobre todo interna. Cuando se eligió a Pedro contra Madina tenían la ocasión para haber acertado o para equivocarse. Después de eso ya no quedan más remedios que esperar resultados de todos los ciudadanos. Si Susana Díaz quería gobernar debería haberse presentado ella y no desear que quien fuera elegido fuera un simple títere en manos andaluzas. Simplemente por que hay muchos que todavía no se han enterado que España es mucho más que Andalucía, incluso está como está precisamente por anteponer Andalucía a la suma de todos. Parecemos atados a Madrid y a Sevilla. ¿Y el resto?