14.9.14

El método más rápido y caro para tratar una depresión leve es con pastillas

Si estás triste, si se te olvidan la cosas, si hoy no tienes ganas de hacer nada, si te estás dando cuenta que las cosas no han salido como pretendías, si crees que te has equivocado en parte de tu vida, si comes más o menos que antes, si te sientes mayor aunque solo tengas 50 años, si a veces compras compulsivamente, si ahora eras un despistado, si el sexo te atrae menos que antes, tienes algunos problemas casi normales en todo ser humano, pero NO tienes una depresión.

Está de moda tomar pastillas para lo que es habitual en la vida de todo ser humanos, que haya cambios y a veces estos no sean positivos. Hoy la inmensa mayoría de españoles han tomado pastillas para dormir o para despertarse, para tranquilizarse o para ponerse más activos. Para ser más optimistas o para ser más atentos.

Si acudimos a un profesional médico con los problemas, y además tendemos a ampliar los síntomas para tener razón en que algo nos sucede, estamos obligando al médico a tener que diagnosticar un problema pues para eso hemos ido. La presión de los laboratorios hacen el resto. No es fácil salir del médico convencidos de que no tenemos nada cuando hemos ido sabiendo —pues lo leímos en internet— que nuestros síntomas son graves. El médico tiene la herramienta perfecta. Unas pastillitas de nada y a volar. Eso si, son pastillas que no se pueden dejar cuando uno quiera, estás atrapado para siempre o para varios años.

Si saliéramos convencidos de verdad de que esto que nos sucede es normal pues la vida no es un camino recto, si saliéramos sin pastillas, nos curarían los síntomas las palabras del médico de igual forma que las pastillas blancas. Pero no sabemos salir convencidos solo con palabras. ¿Es posible en 4 minutos de atención del médico de familia poder resolver una depresión leve, un duelo por la pérdida de un ser querido? SI, con pastillas. Es el método más rápido y más caro.

13.9.14

Meter en la cárcel a Artur Más es lo más rápido para darles más razones

Al leer ayer que amenazaban con meter a la cárcel y hasta con 15 años al Presdiente de la Generalitat Artur Mas si convoca el referéndum anunciado, me ha quedado todavía más confirmado que vamos camino del caos pues no tenemos ni puta idea. ¿En serio no hay nadie con sentido común que mande callar tanta voz equivocada?

Los catalanes que SI quieren la independencia y que eran hace unos meses muchos menos de la mitad, ahora son la mitad, y como sigamos así serán casi todos; y lo que menos necesitan para tener más razones, es a un Presidente de la Generalitat en la cárcel durante unos años. Sería histórico como lo de 1714. Sería un nuevo mártir histórico. Pero no parecemos aprender de los libros de texto.

Amenazar ya es un síntoma de la incapacidad para encontrar soluciones. Pero llegar a los extremos legales es un detalle que tiene precio. Para aceptarlo como una solución se puede explicar todas las razones legales que existen y que sin duda son muchas. Pero la inteligencia política no entiende de razones cuando hay dudas sobre la razón. Tener razones no significa tener razón, y mucho menos que sea inteligente emplear las razones legales para tener la ley histórica y del medio largo plazo garantizada. Ojo con lo que se hace mal empleando la ley, pues se podría emplear la ley para hacer el mal.