La mejor noticia del día. Una hermosa noticia horrorosa

Yo creo que esta es una de las noticias más bonitas del día. Nos muestra que efectivamente nos están engañando, que no son meras conjeturas, que no nos lo inventamos, que los jetas se han infiltrado en la Sanidad española para seguir mangoneando y hacer negocios para sus chalet o sus vicios ocultos.

Esta mujer según publica El País tuvo que pagar 9.300 euros para adelantar la operación de cadera, para saltarse la lista de espera. No es una víctima, es una jeta que cayó en la trampa de otros jetas que presuntamente podrían ser delincuentes. El timo del tocomocho en forma de operación de caderas o de cataratas o de huevos.

—No sea tonto, adelántese la radiografía, no espere, solo cuesta un poco y así tienen usted el diagnóstico mucho antes. La Sanidad ya sabe, es así.

Este tipo de frases se están diciendo en consultas públicas, eso si, con más o menos tono de cabronada según el enfermo al que se dirigen. ¿Eso es joder la Sanidad pública? Yo creo que si y mucho. Por cierto lo normal es que la radiografía la recomienden hacer en Zaragoza en un hospital privado con nombre de facultativo público. Y así hasta un millón de millones de jetas escondidos.

Crecen los partidos de izquierda. Menguan las posibilidades

Crecen los partidos políticos de izquierda en España como crecen las flores en primavera. Ya tenemos a “Podemos” legalizado como partido político por imperativo legal. Pero un partido más de izquierdas a sumarse al lío y barullo, al aplauso pepero que ve crecer a los enemigos sin tener que mover un dedo del abono.

Desde la izquierda nos quejamos del bipartidismo pero lo alimentamos nosotros mismos con nuestra división y crecimiento tumoral. El PSOE y el PP aplauden con las orejas cada vez que nos ven crecer en organizaciones pero no en número de personas adscritas, cada vez que nos ven discutir entre nosotros sin saber explicar los errores y los problemas. Somos capaces de crear partidos pero no de crear soluciones. Y lo que es peor, sin saber explicarlas a la sociedad.

En las próximas elecciones, como muy bien recuerda hoy Arturo Fernández en Público, miles y miles de pensionistas con pérdidas o de mini miliuristas de 600, volverán a votar a la derecha.  Y la izquierda no sabrá nunca por qué, avisando que es culpa de la sociedad. Joder tíos, es culpa nuestra. Mía y tuya, amigo. Mientras no expliquemos mucho mejor, mientras no seamos capaces de sumar líderes creíbles, mientras no dejemos de ser funcionarios de la política, mientras pensemos que la mejor manera de ser de izquierdas es controlar la información a la baja es decir restando y no sumando, nos iremos poco a poco a la mierda social. Eso si, igual tenemos suerte y los populares lo hacen tan mal que ellos mismos se queman en la hoguera. Entonces sí, volverá la izquierda a disimular.