10.2.14

Salvador Dalí modificó el logotipo de Chupa Chups

Enric Bernat fundador de la marca de caramelos Chupa Chups decidió en el año 1969 dar un golpe de efecto y ampliar su comercialización hacia más mercados nacionales e internacionales. Para ello pensó en encargar a Salvador Dalí un nuevo logotipo de la marca Chupa Chups y se fue hasta Figueras en busca de asesoramiento.

Salvador Dalí tras atenderle y pactar un elevado precio por el trabajo tardó una hora en realizar un estudio del producto para potenciar la marca. 

Logo con texto solo en rojo y dejar el negro abandonado; mantener el mismo tipo de letra pues no era el caso ponerse a dibujar tipografía; fondo en amarillo caliente y dos decisiones más importantes. Enmarcar todo en una forma circular lobulada como si fuera una flor y colocar este logotipo impreso en grande dentro del envoltorio y en la zona superior que es la que menos se distorsiona a la hora de tener que envolver el plástico un producto circular. Así de sencillo y de contundente. Poner en valor la marca. Como no he encontrado ninguna imagen con la posición del logotipo en su envoltorio que fuera de la época he tenido que dejar un producto más moderno, a partir del año 1988, donde ya vemos como ha cambiado la tipografía del logo que modificó Dalí.

Si la mentira no fuera al menos pecado, abusaríamos de ella por bonita

El cine es mentira. La fotografía y la literatura es mentira. Lo es hasta que nos la creemos motivados por lo bien que nos la ha construido el director de la orquesta. Hay alguna tendencia en la fotografía a presionar para que todo lo que veamos sea cierto, auténtico, sin manipular. Es otra mentira más. El fotógrafo elige el encuadre, la luz, el momento, la altura de la cámara además del diafragma o la velocidad. El escritor dibuja personajes y los manipula sabiendo que su trabajo consiste en crear mentiras o en manipular verdades para hacerlas más creíbles. La mentira bien hecha es más creíble que la verdad mal contada. Cuando acudimos a una cita nos la preparamos y nos disfrazamos de citado. Hoy en los Premios Goya todo es mentira. Si fuera verdad no les daríamos ningún premio pues sería aburrida. En un documental bellísimo de los nominados se veía volar a un águila inmensa entre los bosques de Andalucía. Era mentira también pues las águilas nunca han volado a cámara lenta. La mentira convierte en más bella a la verdad. Si encima no fuera pecado solo emplearíamos la mentira. Por eso nos la pecaminaron; para que tuviéramos medida.