10.7.13

Los papeles de Bárcenas (de momento) no valen para nada


Los papeles de Bárcenas, es decir, esa presunta contabilidad que demostraría que la pasta gansa entraba y salía por y desde el Partido Popular como quien tiene una gran empresa de tramposos, huelen a basura, pero no serán nada.

En cualquier otro país los responsables hubieran dado un paso al frente y tras aclarar y explicar a su modo, hubieran dimitido. No se les pide mucho más, pero no eso se conseguirá en un país como España que estamos en primero de preescolar en democracia.

Aquí estamos todos esperando como agua de mayo que sean los jueces los que metan el dedo en el ojo y sea inevitable que tengan que ser declarados impuestos unos y otros. Pero hay joder, si los delitos han prescritos. Entonces aseguramos que ya no hay nada de nada. Es tanto como decir que tu puedes matar, pero que si ha prescrito ya no se te puede ni llamar asesino. Jope.

La dosificación de los papeles busca la trampa que de solución. ¡¡Mira que te delato!!; ¡observa qué tengo!; ¡acojónate y ayúdame a partes iguales!

Bien, acostumbrarse a estos dramas políticos es otro drama añadido. Sabemos que Bárcenas ha hablado con varios periodistas de distintos medios. Que todos ellos tienen gotas o chorros de información de primera mano. Que entre ellos solo El Mundo habla y que los demás permanecen callados. Que todavía Bárcenas no ha dicho ante un juez nada que sirva legalmente para acojonar a nadie, que todo son papeles que si los vuelve a negar no valdrían para nada que no fuera para estar convencidos todos pero a la vez para que siguiéramos jugando al avestruz. ¡¡Jope qué tropa tenemos, tíos!!

8.7.13

¿Qué es el federalismo para España? ¿Qué tiene que ver el nacionalismo con el federalismo?


Sobre el federalismo habría que hablar más para aclarar conceptos, como sucede con el nacionalismo o la autodeterminación. Son muchos los que quieren confundir e insistir que todo es “separatismo” y pocos los que en verdad quieren aclararlo pues en su fondo perviven ideas poco claras y algunas de ellas maximalistas.

Los primeros interesados en aclarar qué es el nacionalismo, el federalismo o el derecho a la autodeterminación deberían ser los propios nacionalistas. Pero no se atreven para no perder apoyos internos, pues no existe una sola idea de cada uno de estos conceptos lo que los convierte en complejos para llevar a buen puerto la información, la comunicación clara y sencilla.

Empecemos por decir que no hay una sola manera de ser nacionalista y por ello cada partido político nacionalista cuida muy mucho de no aclarar su postura para no perder apoyos internos, para no asustar a los externos pero que les tienen que votar, para no ser criticado. El gran error es que gran parte de la población asemeja al nacionalismo con el máximo y ya no entra a valorar más opiniones matizadoras.