18.2.13

Han bajado las visitas al blog, pero siempre es por culpa mía

Llegué a más de 4.000 visitas día en mis blog. Sin motivos propios me han bajado en pocas semanas a justo los 2.000 por cambios en San Google lo que simplemente resta gusto a mi trabajo. Escribimos para ser leídos una vez que ya tenemos muy asumidos que ni un euro, oiga.

 Así que uno se plantea si seguir por la misma línea editorial de la nada o si es mejor dejarlo todo aquí, ahora que todavía quedan restos del naufragio. Siempre a los nietos les podré decir que llegué a las 5.000 visitas en un solo día o a las 120.000 en un solo mes. Jodo qué nivel, Maribel.
Pero si lo miras con calma, observas que tener 2.000 visitas día es todo un hecho a respetar, pues poder llenar un auditorio con tantas personas aunque sea para que te miren a la cara unos segundos, es un premio imposible. Aunque joda haber perdido a la mitad de amiguetes.
Pero eso si, la culpa hay que admitirla, es mía. Si no te siguen de fijo los necesarios, si tienes que depender de San Google, es por que lo que escribes no interesa de continuo y punto pelota. Hay que recapacitar.

17.2.13

La dura realidad de los pequeños y honrados políticos

Ayer en Madrid expulsaron de una manifestación anti desahucios a los políticos socialistas Fernando López Aguilar y Beatriz Talegón, abucheados y zarandeados por los manifestantes que no los desean cerca de sus protestas.

El político adulto junto con la joven promesa socialista tuvieron que recordar o aprender que en estos momentos toda la sociedad está contra todos los políticos. También contra los honrados. Las primeras veces que acudes a manifestaciones siendo un pequeño político aguantas mal que increpen a todos los políticos. Te sientes incluido entre ellos. Pero cuando recapacitas te das cuenta que eres tan culpable como los ladrones y jetas, como los defraudadores o los corruptos. Si estás dentro o participas o callas o consientes o no te enteras. Y si estás dentro, tu obligación es cuando menos la de enterarte.
Hoy participar en política es duro pues te crees a salvo de los abucheos al ser crítico contra el actual sistema, pero no valoras que al pertenecer a él, eres objeto de la responsabilidad, aunque la pelees desde dentro. Si no logras hacerla cambiar eres un fracasado y por ello nos merecemos los mismos abucheos que los responsables del fraude.