26.4.12

Informe "Infoempleo 2011" en España. Datos de ofertas y demandas de empleo


En la presentación del Informe “Infoempleo 2011”, la secretaria de Estado de Empleo Engracia Hidalgo, ha puesto como ejemplo que para el 80% de las ofertas de empleo cualificado se requiere una titulación universitaria, cuando solo el 14% de los demandantes registrados en los servicios públicos de empleo tienen ese nivel formativo. Hidalgo también ha destacado que, mientras que el 20% de las ofertas de empleo son para personas que hayan cursado formación profesional, solo el 6,8% de los demandantes la tienen.
Hay pues dos graves disfunciones que debemos resolver con urgencia. Adaptar las ofertas de empleo a la realidad pues no es lógico que el 80% de ellas necesiten de verdad que los demandantes tengan un título universitario, y por otra parte mejorar urgentemente la formación de personas mayores de 30 años, generaciones que por desgracia para la historia de este España, recibieron una formación mucho más baja y de peor calidad que la actual. No nos olvidemos que la formación continua es una grave deficiencia de nuestro servicio público de educación y de formación profesional. Que luego la misma señora diga que por ello se ha tenido que aprobar la nueva reforma laboral es de premio a la estulticia indocumentada.

Hay que aprender a pedir lo que nos merecemos


Mira, tú sabes perfectamente qué es lo que quieres. Pero muchas veces esperas que simplemente te lo concedan, te lo entreguen pues piensas que te lo mereces. Es una apreciación falsa. Por mucho que te lo merezcas, si no lo pides, si no sabes solicitarlo o incluso pelearlo, no te lo darán. Nadie concede nada por que sí, bueno, alguna vez sí, pero muy pocas.
Debes defender tus posibilidades, debes pedir y exigir, solicitar y pelear por tus objetivos, por mucho que no tengas dudas de que te lo mereces. Pedir algo no es de mala educación, es simplemente tener asertividad, defender tus posibilidades, plantear tus deseos. Muchas veces puede suceder que quien tiene que repartir, que dar, no crea en tus posibilidades por pensar que no lo quieres, no lo buscas.
Hay que pedir sin imposición, dando la posibilidad a quien debe dar, que está haciendo un gran favor, que aunque se lo merece, él, quien reparte, tiene la benevolencia de entregarlo y por ello se merece un respeto y una gracia. No se preocupe, a usted lo que le importa es conseguirlo, no le preocupe mucho por tener que agradecer algo que piensa que se merece. Repito, lo importante es tenerlo.
Las personas no están para adivinar nuestras necesidades, nuestros pensamientos. Por eso pedir, indicar, solicitar con seriedad y calma, es lo más normal y efectivo. Muchas veces quien tiene que entregar no sabe a quien, cuando, cómo, de qué manera. Si les simplificamos el camino incluso nos lo agradecerán. Los que nos rodean deben saber qué pensamos, qué esperamos de ellos.