27.3.12

Por qué ha perdido el PP y Javier Arenas en Andalucía, ganado por la mínima

En Andalucía el domingo, se ha producido lo que ninguna encuesta preveía, pero lo lógico si se analiza con los libros de campaña electoral. Era muy complicado que el PP en realidad fuera capaz de revalidar resultados, aunque nadie fuimos capaces de verlo, llevados por una marea azul que todo impregnaba. Por cierto, si nos fijamos en como fueron saliendo los resultados electorales en los medios, con una clara victoria del PSOE hasta ir perdiendo fuelle, queda claro que los núcleos pequeños, los pueblos, votaron mucho más al PSOE que al PP, algo que se corrigió luego según iban viniendo resultados de las grandes ciudades. ¿En donde hicieron los sondeos las empresas? Pero veamos algunos apuntes más para adivinar por donde perdió el PP y Javier Arenas sus posibilidades.

 El candidato Arenas no es un buen candidato para Andalucía. Representa una imagen estereotipada del “señorito” que todavía está muy anclada en las mentalidades más activas del andalucismo que sufrió y conoció épocas pasadas. Cierto es que el candidato Griñán tampoco es un dechado de virtudes, pero su imagen de “profesor” le ayuda en la competencia con Arenas.

 El gran error de una campaña mala, insulsa, apestada de insultos, llena de descalificaciones hacia el trabajo político andaluz de los últimos 30 años, se ha vuelto contra “el cartero”. La corrupción ha dejado de ser un asunto que marca resultados —desgraciadamente en toda España— pues en la misma medida en que hace cambiar el voto por asco, lo hace cambiar por reacción de defensa. Basar toda la campaña en insistir sobre la corrupción ha supuesto que se movilizara a una parte del electorado que no pensaba acudir a votar por desafección política hacia el PSOE. Este voto ha ido al PSOE pero también a IU, es decir NO al PP.

 Negarse a los debates televisivos es un gran error pero lo es más decir que es por no creer en la imparcialidad de la televisión andaluza. Es tanto como decir quien ya se cree que será el próximo Presidente de Andalucía, que le afecta una televisión parcial, que lo que poco que se manipule en el programa de televisión va a engañar a los ciudadanos andaluces. En pocas palabras, es hacer de menos y convertir en tontos a sus ciudadanos indecisos.

 El abuso del poder es malo; el exceso de poder es muy malo. Andalucía es la primera que se ha dado cuenta que “todo” el poder en manos del PP será malo, para resolver los problemas pues no tiene contrapoder que le frene en sus decisiones. La sensación de que existían una serie de medidas muy duras, escondidas hasta que Andalucía decidiera qué votar, es una gran losa pues produce miedo en el votante y responsabilidad ante su decisión.

 A Andalucía no le ha ido mal con 30 años de gobierno socialista pues ha tenido voz en Madrid, ha sabido dignificar Andalucía, ha logrado ayudar a los andaluces que tenían especiales dificultades para estar a la altura económica del resto de españoles. Eso no es compartido por gran parte del resto de ciudadanos del conjunto de este país, pero en los errores de gestión política están parte de la virtudes que han tenido los andaluces para llevar mucho mejor sus economías. Y al final las migajas sirven para engrasar algunas voluntades.

Para qué sirve una huelga general en el Siglo XXI?

¿Sirve de algo una huelga general planteada en el siglo XXI como si estuviéramos a principios del siglo XX?, pues no, con sinceridad y lo saben los sindicatos, los empresarios, los gobiernos y los trabajadores.
¿Debemos soportar las reformas brutales sin podernos quejar?, NO, pero deberíamos haber encontrado otras fórmulas más eficaces para plantear las quejas, y no una huelga general con servicios mínimos amplios y con una duración de 24 horas. Sirve si acaso para desahogar las duras penas de los trabajadores más concienciados.

La sociedad y la mayoría de los trabajadores de hoy no están por la labor de plantar cara a una reforma que entienden incluso necesaria; curiosamente no han acudido a las charlas explicativas que se han realizado para conocer cómo les afectan brutalmente las modificaciones del Estatuto del Trabajador. O no les interesa o no se fían de quien les va a trasmitir información o lo ven inevitable y ya están rendidos. No se han dado cuenta de hasta donde les afectan los brutales recortes de sus derechos.

Pero las reformas son de tal calado, las que ya tenemos y las que van a venir, que inevitablemente vamos camino de un estallido social. No es posible predecir en qué momento la sociedad no será capaz de soportar el haber perdido sus situaciones de un bienestar ya conocido, y se preguntará o planteará que no ha luchado lo suficiente por mantener su nivel de vida. Cuando esto suceda, inevitablemente y como siempre, la violencia será la salida natural a sus preguntas.

En realidad da igual lo que se pueda plantear hoy, de cara a realizar la huelga o no realizarla. Es igual pues no servirá de nada la huelga aunque triunfara, al ser imposible negociar la reforma laboral. Al ser imposible también salir del hundimiento económico y sobre todo social. Al ser imposible desde España plantar cara a Europa.

Los europeos ya no creen en aquella Europa que nos habían dibujado y con la que incluso soñábamos, ni en la democracia incluso tal y como la conocíamos, en los políticos a los que muchos consideran poco menos que apestados, incluso ni en las soluciones públicas. El descontento, de momento callado, es inmenso. Parece imposible revertir esta sensación de apatía social. Y lo que es peor, parece imposible que no lo detecten los políticos, para ponerle remedio por encima de todo. 

Una sociedad no puede funcionar bien con un 45% de paro juvenil, con un 25% de paro general. Y lo es más todavía, hasta hacerse muy peligroso, cuando estos datos duran más de dos años. Peligroso para una generación entera que verá su vida marcada. ¿Será posible meter a una generación de jóvenes sin entrar a trabajar hasta los 30 años, a unos horarios productivos diarios de 8 horas? ¿llegarán a creer en algún momento en la empresa donde trabajen, lo suficiente como para ser rentable y competitivo su trabajo?