29.6.10

Hemos recibido un premio. Dardos 2010




Hemos recibido el premio "Dardos 2010", nos han elegido por parte de un blog amigo como merecedores de ser recordados, lo que nos llena de alegría. Pero no somos gente de recibir premios, lo siento. O lo que es peor todavía, no somos gente de seguir con las cadenas de premios, con la necesaria complacencia en el juego de "pásame la bola". Si, somos raros de narices. Pero qué le vamos a hacer.
Sabemos que internet funciona como todos los mercados actuales, en los que todo sirve con tal de tener "clientes" y en este caso ser leídos. Cierto. Y sabemos que rendirnos es malo pero participar también.
Que nos lean es maravilloso, que se acuerden de nosotros más todavía. Seguiremos escribiendo con más desganas que ganas, pero no lo sabemos hacer mejor. Lo sentimos. Y muchas gracias y un fuerte abrazo a los amigos.

Más formación profesional y humana ante la crisis económica

No sé a ustedes pero a mi me fastidia, me extraña mucho, que en plena crisis económica e incluso sistémica, no estemos hablando más de dos asuntos que considero fundamentales para salir menos dañados: de crear nuevos puestos de trabajo, de crecer en educación o formación
Hablamos constantemente de bancos, de reformas en pensiones o en las normas laborales, hablamos de impagados o de crisis inmobiliaria. Pero no se ven ideas nuevas para modificar la grave enfermedad del desempleo ni mucho menos de modificar nuestros sistemas educativos, por mucho que todos asumimos que son insuficientes o incapaces.
Atendemos el corto plazo, a quien grita más, y no somos capaces de plantear soluciones a los problemas del medio plazo. Unas medidas no deberían suplir a las otras. No se trata de priorizar ni por unas o por otras, sino de no dejar de lado las que nos sentarán las bases de las próximas décadas.
Casi hemos asumido ya —terrible esto— que el desempleo en muchas personas será ya definitivo por edad o por formación. Hemos asumido que tendremos un vacío generacional de casi una década, con todo lo que esto representa para el funcionamiento social. Tenemos asumido además que el mundo sigue moviéndose y que si nos hemos parado, otros —países, sistemas, normas— nos sobrepasarán. Pero no es cuestión de personas políticas que no saben gobernar. Que también. Es sobre todo cuestión de ideas novedosas, de asumir que todo ha cambiado y que los pensamientos viejos no sirven. ¿Qué desearíamos para España, una Merkel, un Sarkozy?, daría igual, ellos también están sin saber resolver los problemas fundamentales. Si somos lentos, los problemas —que siguen moviéndose— nos seguirán envolviendo. Muchas reuniones que no sirven para nada. Muchas desilusión en el tablero mundial. Por desgracia la historia nos ha enseñado en otros siglos cómo se resuelven estos problemas. Y me entra miedo.