18.2.10

Zapatero reta a Rajoy a que presente una moción de censura

Demostrando que Rajoy es algo justo para aspirante, Zapatero tuvo la osadia de presionar a Rajoy para que presentara una moción de censura.
Rajoy no supo responderle.
La obligada hubiera sido que él creía que para beneficio de España, no se debía presentar para no crear más tensión, algo de lo que Zapatero parecía tan dado a jugar con ella.
Pero se calló o respondió balbuceante. Mal y pillado al traspies.
Es inevitable presentarla, aun sabiendo que se va a perder y que además creará más tensión. Pero es que si malo es Zapatero para primero asumir una crisis que todos vimos (ver este blog de los meses en los que Zapatero la negaba con fuerza, por poner un ejemplo tonto) y luego buscar soluciones reales; malo es Rajoy por no saber ejercer la oposición con la fuerza de quien debería estar en un buen momento, buscando consenso no con el PSOE sino con otros grupos y ofrciendo un discurso positivo de soluciones, en vez de jugar a estar sentado esperando a que pase el cadáver.
Ayer perdimos los españoles, sobre todo los desempleados, que no vimos ni una sola idea o propuesta para salir del desastre.
Por cierto ya no es momento de crear comisiones de nada. ¿Ahora?, de servir para algo, se deberían haber creado hace casi dos años. Menos juegos de manos y más trabajo serio, con propuestas y decisiones. Y si no se es capaz, no pasa nada por intentar recabar ayuda de otros grupos. Y si nadie quiere apoyar hay que buscar otras alternativas, por duras que sean para la tensión actual.

17.2.10

Mis últimas líneas (para un ejercicio literario)

Os dejo la propuesta que hago yo, al ejercicio literario de la entrada anterior. Un texto que voy a presentar a la clase de hoy, miércoles.

Sois unos cabrones. Todos.
¡¡No quiero morirme!!
No encuentro salidas, estoy encerrado en esta mierda, no van los teléfonos, este papel se quemará antes de que nadie la lea, ¿qué hago yo aquí escribiendo?…, voy a ponerme debajo de la mesa…, no, será peor, las ventanas no se abren…, leí que era peor si entra aire en un incendio…, algo del efecto chimenea, ¡tranquilo!.
He estropeado mi vida, disimulando para sobrevivir entre vosotros, y ahora no voy a tener tiempo para deciros lo que pienso. Odio el calor del verano y solo de pensar que me voy a achicharrar entre los ordenadores, tiemblo.
¡¡Deja de escribir, coño!!, piensa, ¡piensa!.
No tengo que morir. Yo no. Debo deciros que os odio, que siempre os odié. Tal vez con la mesa pueda romper las ventanas. No debo. Escucho a los bomberos. El suelo quema. No van a llegar. Debo estar tranquilo. ¿Y…?, no, no llegan, seguro.
Hay que respirar, si, hacer ejercicios de…, toallas en las rendijas, el fuego no mata, es el humo el que mata, tengo la camisa y me puedo mear…, no puedo. ¿Observas que no me está entrando humo?, igual yo no me muero de esta. En todos los incendios hay milagros.
No, no sois tan cabrones, si acaso algo id…