8.1.10

El futuro de internet y los blog en el medio plazo

El futuro de internet (en el corto plazo claro, pues la tecnología se mueve muy rápido) es incierto, lo que no quiere decir que tenga dificultades para crecer y multiplicarse sino para ser de calidad. Incluso para mantener la actual calidad.
Hoy El País ha publicado un excelente artículo del catedrático José María Álvarez Monzoncillo que se puede leer en esta dirección, sobre los problemas actuales de internet y su realidad analizada desde un punto crítico.
El futuro de internet depende de nosotros y de las decisiones que tomemos para hacerlo rentable

Sin tener que estar totalmente de acuerdo en todo lo que se expone, si que avisa de algunos puntos muy importantes. Entre ellos la falta de rentabilidad, la escasa presencia de la publicidad como soporte, la imposibilidad de mantener la gratuidad como elemento que garantice la calidad, la “mala” calidad del global de las personas que utilizan internet lo que se traduce en un avance más lento del deseado en contenidos perdurables.
Yo no soy creyente de las redes sociales y por ello me he llevado más de un “aviso”, teniendo que esperar a que pase el cadáver (o no) de mi aseveración, para demostrar quien tienen razón en esto tema. No soy clasista aunque tras mis palabras lo pueda parecer, pero sí cuidador de la calidad como motor de avance. Todo lo que no esté orientado a crecer en calidad no sirve en el largo plazo. Puede parecernos útil en el corto, pero resultará muy complicado su mantenimiento en el medio y largo plazo por la lógica selección de los mercados.
Los blog debemos mejorar, limpiarnos mucho, cerrar todos aquellos que no tengamos un número de entradas determinado y/o otro número de visitantes mínimo, para pasar a crearse un blog 3.0 (ahora que está de moda poner numeritos a casi todo), en donde haya muchos menos portales pero con una garantía de calidad mínima. Son tantos los lugares indexados por los buscadores que se amontonan las informaciones malas con las peores, las buenas con las copiadas. Es muy necesaria la constante actualización de los blog gratuitos alojados tras las grandes empresas que soportan los blog, para separar en la red el polvo de la paja, pues si no es así, llegará a resultar complicado su supervivencia.
Parte de la negación en publicidad para entrar en internet es por que no saben donde está su rentabilidad ni encuentran la forma para que su mensaje llegue al consumidor de forma efectiva. También habrá que seleccionar de alguna manera entre espectadores pasivos y activos, posibles e imposibles.

7.1.10

El mercado de divisas, el dolar y la inflación


Las expectativas son importantes, enormemente importantes en economía. Determinan una previsión económica que apoyan o detraen a la misma recuperación económica.
Desde que cobran importancia en los análisis económicos existen variables relativamente destacables en los informes como el indicador de confianza del consumidor, confianza en la industria, sentimiento económico… que nos informan del lado más social de la economía, del más psicológico.

Además de las expectativas futuras, existen otros elementos sociológicos como la propia visión estructural, no futura, sino presente. Mientras que las expectativas nos informan sobre en que momento del tiempo es mejor actuar (invertir, comprar, vender, ahorrar…), la visión estructural nos informa de donde actuar (en que país invertir, bajo que moneda comprar…).

Mientras que al inicio de la crisis, donde los Estados Unidos se vieron muy deteriorados por el comienzo y la explosión de la burbuja, el dólar se depreció con respecto al euro, ahora está pasando todo lo contrario, aunque los cambios puedan parecer pequeños, las tendencias son claras, incluso en el mercado de futuros, el dólar tiende a subir y el euro a bajar.

A nivel del consumidor todavía no es verdaderamente importante, la globalización permite que la compra directa internacional se vaya ampliando, pero son las empresas las que deben preocuparse por este hecho. Ahora mismo, comprar en EEUU sale cada vez más caro.
Se debería incentivar por tanto el consumo interno, y los estadounidenses deberían aumentar sus importaciones con respecto a la zona euro, (que al contrario, se les abarata cada vez más).

Si bien hace poco, antes de la crisis, se discutía bajo que moneda iría China a intercambiar el petróleo, el debate no pasa de meros vaivenes especulativos. El hecho de que se aprecie el dólar hace que el precio del petróleo en Europa, bajo el euro, pueda subir más de lo normal.
Y el petróleo domina cualquier actividad económica y determina el nivel de inflación.

Pros: Si aumenta la inflación, pueden aumentar los tipos de interés sin que la iniciativa empresarial se vea muy afectada. Los ahorros pueden recibir mayores rentabilidades. Se fomenta la demanda interna y la recuperación económica.
Contras: Los efectos monetarios tienen pocos resultados positivos para los menos afortunados. La renta real cae, y bajo el contexto de recuperación económica, unido a unos planes económicos que van a empezar a desparecer en toda Europa, puede recrudecer el contexto en el que nos movamos.

El problema es que todo esto recae en lo que iniciaba el propio texto, las expectativas. De momento no hay un repunte en el precio del petróleo, y el dólar no ha subido el 10% que algunos vaticinan. Pero estas propias expectativas afianzan aun más el que el dólar tienda a subir, ya que como va a ser un “valor seguro” muchos se animaran en su compra-inversión.

Lo cierto es que una Europa cada vez más desunida no ayuda demasiado.