8.8.09

Sálvame. Un programa de televisión (Telecinco) en relieve.


El fenómeno de este verano televisivo se llama Sálvame, un ¿nuevo? formato televisivo de esa cadena italiana que emite en España con mezcla de éxito y osadía, pero también de amarillo tenue.
Es después de muchos años intentándolo, la muestra más clara de que la televisión en relieve existe, de que es posible conseguir que los formatos tengan volumen, y no sólo de sonido, para entrar en tu habitación e invadirte hasta los huesos.
Es imposible permanecer impasible ante las 3 horas de bárbaras acusaciones entre unos personajes, seguro que inventados por alguien, que se te cuelan en el salón a gritarse y a gritarte. El éxito radica en eso, en que te ofrecen día a día, un espectáculo único, imposible de adivinar si se van a pegar o sólo a insultar, con primerísimos planos que se mezclan con salidas a la calle en busca de los huidos o de entrada de cualquier espectador del programa (del que está allí sin poderse ir a mear, no como nosotros, que estamos pero al menos nos podemos levantar) opinando lo que nosotros desde casa gritamos.
Es el “Circo” en estado puro, con leones y gladiadores, payasos y malabaristas, montadores de jaulas o atriles, presentadores elegantes que gritan avisando de la nueva atracción imposible, atrevida, arriesgada.
Lo que ya no está tan bien es que ordeñen la vaca tanto, como para obligarnos a ver este programa 3 horas al día y el viernes en sesión doble, como el Teatro de Manolita Chen. No está bien, porque nos merecemos al menos, la posibilidad de salir a comprar la cena, de ducharnos al menos una vez a la semana.
Sí, queda el sábado y domingo, pero en algún momento debemos descansar.

7.8.09

Cuatro y La Sexta no se fusionan (entre ellos)

Tras largas e intensas negociaciones, las cadenas de televisión Cuatro y la Sexta no se fusionarán, Prisa y Mediapro con Globomedia, no se han puesto de acuerdo en el reparto de acciones de la nueva empresa resultante.

La Sexta pretendia un reparto del 50/50 mientras que Cuatro creía que el reparto lógico debía ser de 60/40 a favor de Cuatro.
Personalmente creo que es una mala noticia para ambas empresas, y que deberían haber puesto más leña en la mesa de la negociación y acercarse a esa mitad teórica que ninguna aceptaba, del 55/45.
Cuatro tiene más tamaño y mercado pero más deudas.
Sexta tiene menos tamaño y audiencias pero menos pasivo.
Las dos tienen falta de liquidez y de posibilidades claras de ampliar su cuota de mercado hasta niveles muy superiores a los actuales.
Ahora buscarán nuevas negociaciones, y puede que Telecinco abra los ojos, aunque en realidad su modelo de negocio, sobre todo ideario, no encaja con ninguna de las dos que hoy han roto.
No sirve de nada fusionarse con pequeñas empresas, pues el resultado será más grande pero sin músculo. Y la aprobación de la TDT de pago beneficia a la Sexta que podrá competir con Digital+
Tal vez una reorientación del negocio de esta y una bajada clara de sus precios de abono, serviría para plantar cara al futuro. La bajada de abonados es una sangría que hay que parar si se quiere seguir demostrando que se es potente. No lo supo ver Prisa o Digital+ en su momento, y ahora paga el error.