2.10.08

Un perro amigo como terapia para la depresión

En este blog hemos hablado en varias ocasiones sobre la depresión, pero nunca de la posibilidad de tener en la familia un animal de compañía como terapia. Debe hablarlo con su médico y con sinceridad escucharle.

Sin duda es una elección muy interesante pero que hay que hacer con mucha responsabilidad, pues estamos hablando de una vida, de un animal que debe tener un trato perfecto. Hay que analizar la vivienda, el tiempo libre para poderlo atender, los gastos, y asumir que serán 15 años de relación positiva, pero que hay que tenerla con calidad mutua.

Tener un perro en casa ayuda a sobrevivir ante los golpes de la depresión, lo recomiendan los médicos y es una medicina sin efectos contraproducentes.

Ayuda a entender desde otra óptica la vida, a entregar vitalidad y cariño, a que tú estés pendiente de un ser vivo pero a que también el perro esté pendiente de tí. Se intercambia afecto, cariño, amistad, calor, vida.

Un perro en el hogar, si se sabe elegir la raza y el tamaño con arreglo a las posibilidades de cada familia, es una elección perfecta para obligarte a salir de casa, para que tengas una actividad vital de intercambio con un ser vivo más.

Puedes estar segur@ que el perro te entregará más, mucho más, de lo que tú le entregues a él.

Bichón Maltés como elección de un buen perro de compañía

En posteriores entradas les dejaré imágenes de mi Bichón Maltés, un perro macho maravilloso, nuestro primer perro en el hogar, que es todo energía pero con mucha inteligencia.
El perro Bichón Maltés es un perro enérgico, muy cariñoso, que le gusta jugar con todos en la casa, pero que a la vez es capaz de obedecer las órdenes que le des.
Puedes jugar hasta que tu te canses, porque es muy difícil que el se canse, puedes provocarlo y mandarle parar con una simple orden.
Perro poco obediente ante la presencia de hembras, pero al que se puede enseñar a obedecer para que no se separe de su dueño.
No se le cae el pelo aunque si que necesita un peinado continuo, mejor si es posible todos los días. En realidad su pelo es muy suave, como lana, muy agradable al tacto y que se limpia con facilidad. No es un perro que se ensucie mucho, algo increible con un pelo largo, sedoso y además blanco, pero es así. Si se le ensucian las patas, una simple ducha en las patitas sirve para dejárselas limpias de manera rápida.
Es cariñoso con los niños y sabe defender muy bien el hogar, con ladridos ante sonidos extraños, pero nunca ataca y sabe controlar muy bien la mordida, sin hacer nunca daño.
Una buena elección.