La fluoxetina no cura, sólo ayuda a mantenernos en situación de prevengan. Cuando entramos en depresión, toda la maquinaria de la farmacia, desde el Prozac a otras marcas de fluoxetina, no hacen sino mantenernos igual, que puede que no sea poco, pero que no es suficiente.
Es verdad que sube la serotonina, pero nuestra manera de pensar, de enfrentarnos a la vida en muchos casos, si no cambian otros condicionantes de nuestras vidas, no cambian y no consiguen curarnos del todo.
¿Qué es curarse una depresión? ¿pero tenemos depresión?
Pues debería ser como en todo tipo de enfermedades, estar con la misma calidad de vida que antes de tener la enfermedad.
Pero en las depresiones es muy complicado volver a las situaciones anteriores a como se estaba al iniciar el proceso.
Creer solo en la medicación es un error. Como lo es y tremendo, dejar de tomar la medicación.
Debemos seguir tomando fluoxetina tal y como nos lo indica nuestro profesional médico, pero también debemos analizar nuestras vidas, ver qué podemos cambiar de aquello que nos duele y afrontar el reto de vida como un camino nuevo que debemos recorrer con calidad de vida.
Mucho cuidado con mis palabras. Si usted tiene una depresión severa, importante, entonces no lo dude, si le han recetado la fluoxetina debe tomarla y es una medicación perfecta, pero mucho más importante es acudir a un profesional médico.
Pero si tiene una depresión media o leve, piense en su vida, en el amor que le espera, en su familia, en su libertad, y tome decisiones acertadas.
16.9.08
La reforma del mercado de trabajo
En muy poco siglos hemos pasado de trabajar en el campo a trabajar en fábricas para pasar a trabajar en casa.
Hemos pasado de trabajar con la tierra y productos terminados a trabajar con productos intermedios que ayudábamos a crear en una parte, para terminar trabajando con productos que no llegamos a comprender y que no tienen forma.
Hemos pasado de trabajar con bueyes a trabajar con máquinas para pasar a trabajar con software.
Desde trabajar para nosotros y la familia hemos pasado a trabajar para un empresario para terminar otra vez trabajando para nosotros teniendo como clientes a muchos empresarios.
Los horarios de trabajo han pasado desde el “de sol a sol” al de “jornada continua” terminando en el actual de “trabajar en cualquier momento de la semana”
Sin duda estos cambios, que se aceleran progresivamente a una velocidad impresionante, no han terminado. No tiene pues sentido hablar con lógicas antiguas para encontrar soluciones a problemas que todavía no podemos comprender, por novedosos.
El autoempleo va a ser la tónica futura, pero gestionado todo desde el hogar, no creando producción sino servicios que tendrán un valor relativo basado sin duda en los conocimientos.
Quien pretenda vender servicios que los otros puedan hacer, fracasarán. Sólo los que vendan servicios que nadie puede hacer tendrá éxito.
Servicios duros y de fuerza o servicios con una muy alta preparación.
Desde personas que sirven a enfermos a ingenieros que resuelven problemas.
Aquellos trabajos que nadie quiere hacer, a medio plazo, se tendrán que pagar mucho mejor.
Aquellos trabajos que podamos hacer todos nosotros en casa, aunque no seamos profesionales, no valdrán nada.
Hemos pasado de trabajar con la tierra y productos terminados a trabajar con productos intermedios que ayudábamos a crear en una parte, para terminar trabajando con productos que no llegamos a comprender y que no tienen forma.
Hemos pasado de trabajar con bueyes a trabajar con máquinas para pasar a trabajar con software.
Desde trabajar para nosotros y la familia hemos pasado a trabajar para un empresario para terminar otra vez trabajando para nosotros teniendo como clientes a muchos empresarios.
Los horarios de trabajo han pasado desde el “de sol a sol” al de “jornada continua” terminando en el actual de “trabajar en cualquier momento de la semana”
Sin duda estos cambios, que se aceleran progresivamente a una velocidad impresionante, no han terminado. No tiene pues sentido hablar con lógicas antiguas para encontrar soluciones a problemas que todavía no podemos comprender, por novedosos.
El autoempleo va a ser la tónica futura, pero gestionado todo desde el hogar, no creando producción sino servicios que tendrán un valor relativo basado sin duda en los conocimientos.
Quien pretenda vender servicios que los otros puedan hacer, fracasarán. Sólo los que vendan servicios que nadie puede hacer tendrá éxito.
Servicios duros y de fuerza o servicios con una muy alta preparación.
Desde personas que sirven a enfermos a ingenieros que resuelven problemas.
Aquellos trabajos que nadie quiere hacer, a medio plazo, se tendrán que pagar mucho mejor.
Aquellos trabajos que podamos hacer todos nosotros en casa, aunque no seamos profesionales, no valdrán nada.
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