9.8.08

No se os puede dejar solos

No se os puede dejar solos, me voy dos días a descansar más todavía, y me encuentro a la vuelta que Georgia que es un lugar en donde viven seres humanos está de guerra con Osetia del Sur y los rusos que es otro lugar en donde además de frío tienen muy mala leche.
Para colmo, dejo internet sin controlar un par de días y la página de El País me cambia el diseño poniendo marcos negros, como si un becario se hubiera vuelto loco mientras los de plantilla están de piscina. Así no, colegas, si no tenéis ni idea de cómo mejorar el diseño de algo, lo que dicen os libros es que hay que copiar. Si a una copia le cambias dos tontadas, te queda algo original y nuevo, y si tienes dudas revisa los juicios del burro de los catalanes, e incluso tienes posibilidades de que lo nuevo, sea mejor que lo original. Es lo que tiene la copia.
Los rusos y los surosetios no han necesitado modificar ni un ápice de su cabreo mutuo con Georgia para confeccionar una guerra diferentes, porque todas las guerras son distintas, en todas ellas mueren seres humanos que no habían muerto antes. Seguro que en esta todos probarán armas nuevas y que eso si, contaminan menos.
Es lo que tienen las guerras, que siempres sufren los más pobres de todo. El sistema está hecho a la perfeccción desde hace muchos siglos, Da igual si es una guerra santa o roja, si es con bayonetas caladas o con bombas atómicas, si es en la selva o en Colonia. Los que sufren siempre son los más preparados para sufrir, los pobres de espíritu y de bolsillo.
La guerra de Osetia del Sur y Georgia tiene mal color, pues han entrado los rusos a decidir, y cuando entra uno de los grandes ya se sabe, hay dos caminos. O el otro se calla y asiente o no se calla la arma.
Decir que "eso no se hace" no es decir nada, es simplemente callar dando gritos.
Casi es mejor que no se cabreen más ni los unos ni los otros, y que los pobres de Georgia y Osetia del Sur se rindan pronto. Es por su bien.
Lo que diga la rubia. En este caso, lo que diga Putin.

6.8.08

Los blog en verano son un fracaso

En verano los lectores y navegadores de Internet, los julandrones que no tienen nada que hacer y se dedican a volar su imaginación por el ordenador, son muchos menos.
Entre otros motivos porque muchos de vosotros estáis de vacaciones y los que quedáis de guardia os hacen currar el doble y no os da tiempo muerto para dedicaros a viajar por esta santa casa que es Internet y es la vuestra.
Queda claro, que contra más personas hay trabajando, más lectores tenemos los constructores de blog, y más visitas tenemos además, en las horas de oficina. Pero os juro que no pienso comentárselo a nadie.
Pues eso, que como no tengo lectores, casi lo mejor sería cerrar el garito, no pensar en escribir pensando, porque no merece pena ni aliento, pero por otro lado como me encanto de escribir tontadas, pierdo la razón de ser y convierto la ruina que supone no tener lectores en una majadería más y me olvido de ello con tal de no dejar de practicar con mi vicio secreto y hecho a mano, el escribir.
Si, todavía escribir se hace a mano, ya no con pluma de ganso, sino con teclado de manzana, en mi caso blanco casi inmaculado si no fuera por un leñazo que le metí un mal día en que se me calló al suelo al intentar que no fuera a la baldosa un par de chinchetas teniendo al perro sobre mis rodillas.
Si, escribo sentado en un sillón, con el teclado tapando mis zonas nobles, les juro que con poco teclado me sirve, y a veces tengo a Chusky, un Bichón muy bicho, entre el teclado y mis manos.
Es costoso, pero se puede escribir en esa mala postura, todo es por el gusto que da tener a un amigo encima de la tripa, quieto y sin que te pida cervezas.
Tener la tripa calentita y asegurada por un bicho amigo, es otra forma de hacer el amor sin practicar sexo. A mi edad, encontrar muchas maneras de lograr autoengañarme, es un premio a la imaginación.