9.4.07

Irán y sus "cositas" (2)

No se lo que sucede en Irán, y lo digo con levedad porque ya me canso de pensar. El mundo occidental se juega mucho en esta partida; el sistema económico actual, el que llamaron capitalista dando valor principal al capital por encima de muchos otros que se quedaron perdidos, se juega su existencia a medio plazo y no es ninguna amenaza ni profecía de escritores ansiosos en los desastres o en las añoranzas de otros sistemas perdidos. Es una realidad que cada día se pone más de manifiesto porque no somos capaces la sociedad occidental de dar una respuesta que no sea la guerra, y además esta la hacemos mal.
No estoy a favor de la guerra, pero a veces puede ser un sistema de defensa, puede ser un sistema menos malo que otros. Eso si, como todo en la vida hay que hacerlo bien o callar y dedicarse a otras cosas.
¿Donde están los políticos que entienden de política, los profesionales del liderazgo?, ¿sólo en el otro bando?. Pues apañados vamos.

La familia y sus futuros a medio plazo

Decir que la familia actual tiene hoy un papel muy distinto al que tenía hace 3 ó 4 décadas es algo obvio, no tan sencillo sería decir si el cambio ha sido para mejor o no, o el menos analizar si en el camino hemos perdido equipaje. Lo cierto es que algunos elementos nuevos no están funcionando bien. 

Y aquí parte tan importante de la sociedad como son los maestros, los sociólogos o los asistentes sociales tendrían mucho que decir si les dejaran.

Confundimos la libertad conseguida, que es maravillosa, con la pérdida de valores y con el consumo inmediato de todo. Incluida la propia vida. Hoy a edades cada vez más tempranas los niños ya necesitan consumir todo lo que existe, pero además y en mucho casos sólo aquello que es fácil de conseguir, aquello que no cuesta esfuerzo.

Los padres, los educadores y las autoridades sociales, sin caer en el error del todo lo contrario, tendríamos que empezar a preguntarnos qué sucede en una sociedad que no puede/quiere tener hijos y que en caso de tenerlos no los puede atender en calidad. 

Tapar con mínimas ayudas económicas lo que realmente son problemas sociales muy distintos, es de ciegos. Como lo es no valorar ni el papel de los abuelos ni la realidad de una nueva sociedad que viene de fuera, que tiene unos valores diferentes y que a medio plazo pueden hacer cambiar la mirada de los problemas y de las socluiones.