28.8.06

Hacer un alioli falso es muy sencillo

Les presento a la reina de las salsas pero algo disfrazada. Es cierto que la salsa alioli es simplemente aceite y ajo batido a mano hasta que emulsiones, pero resulta complicada de hacer y requiere una gran mano para hacerla espesa y suave.

Todos (casi) hacemos la alioli con trampa. Una mayonesa con ajo puede sustituir casi perfectamente a la original.

La reina es la mayonesa, pero esta vez la vamos a adornar un poco con el ajo. Se ponen en el vaso de la batidora dos ajos pelados y cortados en trozos junto al huevo y se cubre de aceite. Con la batidora se va trabajando y añadiendo aceite hasta conseguir el espesor deseado, más si la máquina gira más rápido. Sal y a servir. Un minuto de tiempo.

Esta salsa se puede tomar acompañando una fideuá, o unas patatas cocidas, pero ojo, también para mojar los cantos de unas simples patatas fritas de bolsa o completar el gusto de unos caracoles a la plancha.

Si deseamos salirnos un poco de la receta básica, unas gotas de limón y un chorrito de Jerez o de un vino rancio la convierten en otra cosa con más historia. Eso si, ojo con el estómago y con el aliento, que se resistirán a comportarse.

24.8.06

Saber ver, mirando con detenimiento

No se trata solo de mirar, sino de encontrar, de saber ver lo que nos rodea, de hallar el sentido que alguien quiso disponer en los elementos que nos rodean.

Nos envuelven imágenes que a veces se nos muestran en negativo, al revés, disfrazadas de gigantes cuando son molinos, con ánimo de distraer precisamente para eso, para que nuestra mirada se quede en un momento con ellas y nos sujeten unos instantes.

Mirar hacia arriba y ver…, es a veces un ejercicio de lo más gratificante. Tal vez haya que mirar mejor.