Si en el año 2012 ya nos lo avisaba El Roto desde El País, pueden suceder dos cosas, que no queramos leer, o que no nos creamos lo que leemos.
Las concesiones de beneficios son siempre temporales. Los dramas de la pobreza son siempre perpetuos.
Los avances sociales, sobre todo si son importantes pueden ser flor de unos meses…, a poco que no sepamos cuidarlos o construirlos con buenos cimientos.