Perich decía en la viñeta que a la escuela se viene a estudiar, no a pensar. Lo cual es una gran tristeza.
Pensar sobre lo que se estudia es el fondo de la forma, es lo que debe importar si queremos que lo aprendido se nos quede dentro.
¿No es posible aprender a pensar mientras se piensa sobre lo que se aprende?
Pero a veces es que damos la sensación de que lo que queremos que se nos quede dentro no es lo que nos interesa como personas, sino lo que le interesa a los que dominan los procesos.