Hay una cadena de televisión de pago, con fama de muy progresista, que no permite críticas a ciertos partidos políticos y su nivel de permisividad lo marca la dirección de la Cadena a sus colaboradores, y no los programas y sus directores, que también tienen que tragar con el contrato como miedo. El grado de libertad viene marcado de fábrica, pero los espectadores no tienen que notar que existe una marca en la pared.
Saltarse las órdenes supone el despido aunque sean colaboradores muy conocidos y reconocidos. Y así lo van diciendo uno y otro, poco a poco por el miedo a que se les cierren más puertas de las que ya se les han cerrado. Y el que no quiera cumplir el Contrato, ya sabe, tiene que pagar super indemnizaciones.
La democracia es lo más débil de todos los sistemas.
Y los POLÍTICOS los que menos mandan en la política. Pero son los que reciben todas las críticas feroces e insultos.
¿De verdad hay gente tan buena persona que se cree que se puede vivir sin políticos?
Desde los Griegos y seguramente mucho antes, es imposible vivir sin un sistema de personas que ejerzan la política. Ni los anarquistas lo han logrado nunca, y cuando lo han intentado los resultados han sido muy nefastos.
Podemos eso sí, que manden unos políticos u otros. Que los elijamos nosotros y nos equivoquemos, o que se elijan entre ellos y con ayuda de los que realmente mandan.
¿Que quién manda de verdad?
Pues mandan los que no tienen nunca nombre ni apellidos para así no ser molestados. Todos sabemos dónde están, por qué mandan y a qué se dedican. Pero o no tenemos huevos para insultarlos, o no sabemos insultarnos. Pero os puedo asegurar que los políticos son los mas tontos de este teatro. Tontos, por intentar resolver problemas y saber de antemano que están por debajo del PODER. Y lo digo yo que he sido político chiquito.
Julio M. Puente Mateo