Somos un país curioso, muy amigo de nuestros amigos… de bar, pero que no sabemos participar en asociaciones de ningún tipo. Si acaso las de domingo en el partido de fútbol. Nos gusta estar con gente, pero en el bar, nunca en una mesa. Alrededor de unas cervezas, nunca alrededor de unos papeles. Y eso nos diferencia de muchos países de Europa. Es como poco curioso.
Hemos sufrido como nadie que en la pandemia tuvieran que cerrar los bares. Se han escrito ríos de tinta sobre este tema. Pero no podían ir a ver a los padres o abuelos a la Residencia o no podíamos quedar con los hermanos, novios o amigos si no vivían en tu ciudad. Y de eso se ha escrito mucho menos, no se han hecho manifestaciones. Es como poco… sí, es curioso.
Por eso, por ser raros es por lo que las soluciones a nuestros problemas siempre son también raras. Y lo más curioso es que además queremos seguir siendo como somos, diferentes.