Mientras sumamos otro día más superando los 300.000 contagios de COVID-19 en 24 horas repartidos por todo el mundo, vemos hoy que Cataluña ha creado su propia App para saber e informar de los contactos que puedan tener COVID, ajena a la global de toda España. Es decir, si voy de viaje a Cataluña ni me informará ni les informará de mi interrelación con la enfermedad.
Estamos tontos.
Sin duda estamos a la misma altura social que con la gripe de 1918, aunque haya pasado más de un siglo. Si entonces se multiplicó en los cuarteles y en los conventos, ahora se multiplica en las Residencias de Personas Mayores. En vez de matar soldados y monjas, mata a viejecicos que no ven a su familia.
Y nos creemos modernos.