Una multinacional es la que distribuye sus empresas entre dos países diferentes, sean de almacenaje, producción, ensamblaje, investigación, distribución, etc.
Este tipo de empresas tiene un valor estratégico importantísimo en los nuevos tiempos globalizados. Por lo que representan, por el tipo de actuaciones económicas y laborales que realizan, por su capacidad de negociaciones y presión sobre gobiernos extranjeros, por su capacidad para movilizar mercados, por su importancia en controlar flujos de capitales, impuestos o crecimientos laborales.
Dos ventajas claras que miman, que cuidan, que vigilan constantemente y que son los dos activos que les hacen poder controlar el mundo. Los beneficios vienen directamente de estos dos activos. Tener la mejor formación y tecnología para crear más tecnología. Y tener o crear Marcas que inspiren, den confianza, controlen mercados, sean vendibles por el nombre y no por el producto.
A partir de estos pequeños conceptos sobre las multinacionales vamos a entender mucho mejor todos nosotros sobre qué terreno se juegan las batallas comerciales mundiales, las guerras comerciales no explicadas, y sobre todo qué buscan.
Sencillamente el poder. No el beneficio a corto plazo, tangible, de llevárselo al bolsillo. Buscan controlar lo que tienen los demás, no solo lo que tienen ellos.
Este tipo de empresas tiene un valor estratégico importantísimo en los nuevos tiempos globalizados. Por lo que representan, por el tipo de actuaciones económicas y laborales que realizan, por su capacidad de negociaciones y presión sobre gobiernos extranjeros, por su capacidad para movilizar mercados, por su importancia en controlar flujos de capitales, impuestos o crecimientos laborales.
Decir empresas multinacionales no supone siempre hablar de empresas privadas, pues las hay públicas e incluso las hay creadas a partir de la necesidad de controlar mercados o espacios económicos en otros países.
Cuando hablamos de Bonos Basura, o Fondo de Riesgo o Inmobiliarias Mundiales que compran paquetes de valores hipotecarios, no sabemos bien nunca quién está detrás de cada una de ellas. Incluso si son empresas adquiridas por Bancos o por los llamados Fondos Buitre, tampoco sabemos si hay países dentro de esas empresas. ¿Alguien nos puede garantizar que en un banco español no hay accionistas que son directamente países extranjeros, que compran o vender y controlan?
No todas ellas son grandes, aunque las 500 empresas multinacionales de más tamaño superan el 50% del movimiento comercial del mundo y representan sobre un 80% de las transacciones sobre tecnología que hay en todos el planeta. Tienen pues importancia en todos los sectores económicos, pero también y sobre todo en el conocimiento y la innovación.
Hoy se superarán las 120.000 empresas multinacionales con casi un millón de empresas afiliadas a sus grupos. Pero lo importante para la globalización negativa no son los números de empresas, sino las que representan las 500 ó 1.000 primeras posiciones por tamaño. El resto son empresas multinacionales pero con un poder relativo, y que sufren en muchos casos las zancadillas de otras empresas multinacionales más grandes, que nunca quieren ver crecer este pastel de poder y control mundial.
De las 500 primeras podemos ver que unas 160 están en Europa, unas 150 en Norteamérica y unas 150 en Asia. Y aquí es donde empezamos a ver el crecimiento de las Multinacionales de Mercados Emergentes (MME) que quieren copar mercados nuevos, tener presencia en zonas viejas, controlar mercados y producciones con sus propias armas.
Una multinacional tiene sobre todo dos herramientas básicas que desean copar y controlar. Dos activos que les diferencian claramente del resto de empresas y de mercados, y que son los que les dan valor en el mundo. Tomar nota de estos dos activos, pues nos sirven para cualquiera de nosotros, como emprendedores de pequeñísimo tamaño.
No todas ellas son grandes, aunque las 500 empresas multinacionales de más tamaño superan el 50% del movimiento comercial del mundo y representan sobre un 80% de las transacciones sobre tecnología que hay en todos el planeta. Tienen pues importancia en todos los sectores económicos, pero también y sobre todo en el conocimiento y la innovación.
Hoy se superarán las 120.000 empresas multinacionales con casi un millón de empresas afiliadas a sus grupos. Pero lo importante para la globalización negativa no son los números de empresas, sino las que representan las 500 ó 1.000 primeras posiciones por tamaño. El resto son empresas multinacionales pero con un poder relativo, y que sufren en muchos casos las zancadillas de otras empresas multinacionales más grandes, que nunca quieren ver crecer este pastel de poder y control mundial.
De las 500 primeras podemos ver que unas 160 están en Europa, unas 150 en Norteamérica y unas 150 en Asia. Y aquí es donde empezamos a ver el crecimiento de las Multinacionales de Mercados Emergentes (MME) que quieren copar mercados nuevos, tener presencia en zonas viejas, controlar mercados y producciones con sus propias armas.
Una multinacional tiene sobre todo dos herramientas básicas que desean copar y controlar. Dos activos que les diferencian claramente del resto de empresas y de mercados, y que son los que les dan valor en el mundo. Tomar nota de estos dos activos, pues nos sirven para cualquiera de nosotros, como emprendedores de pequeñísimo tamaño.
Formación y Tecnología
Marca
Dos ventajas claras que miman, que cuidan, que vigilan constantemente y que son los dos activos que les hacen poder controlar el mundo. Los beneficios vienen directamente de estos dos activos. Tener la mejor formación y tecnología para crear más tecnología. Y tener o crear Marcas que inspiren, den confianza, controlen mercados, sean vendibles por el nombre y no por el producto.
A partir de estos pequeños conceptos sobre las multinacionales vamos a entender mucho mejor todos nosotros sobre qué terreno se juegan las batallas comerciales mundiales, las guerras comerciales no explicadas, y sobre todo qué buscan.
Sencillamente el poder. No el beneficio a corto plazo, tangible, de llevárselo al bolsillo. Buscan controlar lo que tienen los demás, no solo lo que tienen ellos.