Como nos parece poco enfrentarnos en la calle o en las plazas, ahora lo hacemos por obligación legal. Dándole importancia a un color o a un lazo de tela o de plástico, como si nos fuera la vida. ¿Han viajado al sur de Francia para ver cómo están las calles y los árboles? Pues vayan y dense un paseo.
Prohibimos el amarillo y ponemos el blanco. Prohibimos el lazo y sacamos flores. Prohibimos una frase y la traducimos. ¿Estamos jugando a jodernos?
Cataluña y España necesitan mucha más altura de miras, muchas más ganas de resolver y no de joder “al otro” venga de donde venga. pero podemos seguir jugando a esto. Hay algunos que se están frotando las manos y salen perfectamente beneficiados. Luego nos preguntaremos los motivos.
No puede ganar Cataluña la independencia, pero lo curioso es que nadie piensa que podemos perder todos en esta forma de querer resolver los problemas. TODOS.