Nos han hecho creer desde los neoliberales que nacieron con Reagan y Thatcher que cuantos menos impuestos tengamos que pagar, mucho mejor para todos. Incluso los llamados partidos de izquierdas sin serlo se lo han creído y han presentado año tras año lo que llamaban reformas fiscales que lograban rebajar los ingresos en impuestos. No hay que olvidar que España es uno de los países donde menos impuestos se pagan.
En España se pagan sobre los ingresos anuales una media del 43% (35,6% sobre las renta de trabajo) mientras que en Francia se paga un 57,5% (51,1% sobre trabajo) o en Alemania un 52,3%.
Estas cifras bajan o suben según el tipo de análisis que se aplique, pero sus diferencias entre países se mantienen.
Por ejemplo el país que menos impuestos paga es Congo con un 7,6%. Podemos ver hacia dónde queremos ir, si hacia los países ricos de Europa o hacia los países pobres de África.
Pero insistimos en España con una bajada de impuestos sin explicar, como mantra que garantiza votos. ¿A quién le bajan los impuestos?
Por cada impuesto que no se recauda, sea en sucesiones, en las grandes empresas o en transacciones bancarias, es un impuesto que tienen que pagar entre todos. O bajar la recaudación y con ello el Estado de Bienestar. No hay más cuentas posibles.
O nos acercamos al Congo o hacia Alemania.
La respuesta sencilla y que nos han enseñado como defensa es que: impuestos ¡no! con mi dinero, pues se lo gastan “ellos” en juergas o se lo llevan crudo. Y aquí se acaba la historia.
Y la izquierda ha ido cayendo en este marco mental fácil y simple y no ha sabido salir de él.
Cuando hablamos de subir impuestos nunca se habla de subírtelos a ti. Entre otras cosas porque tu…, tiene pocos ingresos.
Las distribuciones impositivas es lo que logran un reparto social más sencillo o más egoísta. Más en la línea de países del Norte de Europa o más hacia Indonesia. Redistribuir las rentas a costa de entregar más servicios comunes a todos o de que unos se queden con más a costa de que otros tengan menos.
Enseguida los marcos mentales neoliberales dicen que eso de redistribuir rentas a costa de subir impuestos es comunismo, es el camino abierto hacia el comunismo. Como si en Suecia o Dinamarca o Noruega o Islandia caminaran hacia el comunismo.
Subir los impuestos puede ser bueno o malo, depende. Bajar los impuestos siempre es malo aunque nos hayan convencido de lo contrario.