Sí, estos son dos amuletos de cerámica estriada, con forma fálica y cabeza de carnero y lobo. Uno mismo, 2.000 años después, se puede preguntar para qué los podrían utilizar. Ya, sí, caben explicaciones, es cierto. Se encontraron en la Vía Augusta en la provincia de Gerona y es posible pensar que al igual que sucede veinte siglos después, en estas vías principales se asentaron algunos locales de compartir sexo.
Pero también es posible pensar que no tienen que ser falos para sexo de alquiler, podrían ser utilizados para sexo doméstico. ¿Pero por parte de quien? Y sin duda hay que pensar que eran empleados como consoladores en ambos sexos, aunque nos sigue quedando la duda de saber quien era el que los poseía, los compraba, o con quien los utilizaba.