28.2.17

Mega ciudades como problema de sostenibilidad

En el año 2014, la ciudad más poblada del mundo era Tokio, con 37,8 millones de habitantes, seguida por Delhi, con 25 millones, y Shanghai con 23 millones de habitantes. Les siguían Sao Paulo y México D.F., con 20,8 millones, así como Mumbai y Osaka, ambas con poco más de 20 millones de pobladores.

Los análisis y proyecciones para el año 2030, nos indican que tanto Tokio, Delhi y Shanghai continuarán siendo las urbes más pobladas del mundo, en ese orden, aunque luego les seguirán Bombay, Beijing, Dhaka, Karachi, Cairo y Lagos.

La ONU advierte que el 55% de la población mundial vive ya en áreas urbanas, y que en 2050 estas zonas concentrarán el 66% del total de la población en el mundo. Los mismos análisis advierten además que el 90% del crecimiento de la población urbana en el mundo en las próximas décadas, de más de 2.000 millones de habitantes nuevos, se concentrarán en Asia y África, en especial en los países de India, China y Nigeria.

Para el año 2050, se calcula que India añadirá unos 400 millones de habitantes urbanos a sus ciudades, en tanto que China añadirá sobre los 300 millones y Nigeria sumará otros 200 millones de nuevos pobladores a sus actuales ciudades. Ese mismo informe advierte que mientras hoy existen 28 grandes ciudades, con más de 10 millones de habitantes, en el año 2030 tendremos en el mundo 41 de esas ciudades casi ingobernables.

 El crecimiento poblacional del mundo se asentará sobre las grandes ciudades, creando nuevos problemas de sostenibilidad y de acción social, hoy imposible de predecir e intentar idear soluciones. El ser humano tiene una capacidad de adaptación a las dificultades que es tremenda, pero muchas veces esas capacidades no gustan a los que no necesitan adaptarse a nada, pues no tienen problemas. El conflicto está servido y aunque tenemos ejemplos de lo que sucede en este tipo de situaciones, ninguna nos gusta ni a los políticos, ni a los sociólogos.
 
¿De qué forma se pueden resolver positivamente los problemas personales de una familia que viva en cualquiera de estas conglomeraciones impersonales,  donde las necesidades se multiplican exponencialmente hasta lo imposible? Tan solo las propias comunidades de vecinos pueden acceder a las autoayudas, a la autoorganización social.

Crecimiento insostenible de las grandes ciudades

Todos admitimos como imparable el éxodo o la inmigración de las personas de las poblaciones menores o rurales, hacia las grandes urbes metropolitanas. Lleva muchas décadas sucediendo, y en la medida que cada país o zona mundial que despega en sus economías internas logra una industrialización mayor, más rápido se hace este movimiento migratorio interior de personas.

Pero hay un paso intermedio que nos saltamos, y que es la solución a poder gestionar este éxodo millonario con más éxito y sobre todo con más sostenibilidad. La creación o potencialización del crecimiento, de ciudades intermedias.

Si observamos el gráfico que he dejado, vemos que en 45 años los países de habla hispana aquí representados, han crecido en población pero también lo han hecho y en mayor medidas sus capitales, sus núcleos más poblados, hasta convertirse en algunos casos en auténticos mamotretos de ciudades casi ingobernables.

En casi todos los casos aumenta más la capital de la nación que la propia nación. Pero tenemos dos ejemplos clarísimos desde donde analizar que esto es insostenible. México D.F. ni Buenos Aires son ejemplos donde coparse, sino al contrario, de donde huir como planificación urbana.

Una ciudad de más de tres millones de habitantes, o una gran metrópoli que unifica a ciudades menores a las que absorbe hasta crecer por encima de los cinco millones de personas, nunca debería existir. Esos deberían ser los puntos de señal de alarma.

La pobreza oculta en una gran urbe de seis millones de habitantes solo se puede remediar con caridad. Se resuelve para evitar violencia, no por justicia sino por miedo o por labrar una seguridad y tranquilidad a costa de NO resolver las injusticias sociales.

Las políticas urbanas de los países deberían trabajar el crecimiento y el éxodo hacia ciudades desde los 10.000 a los 100.000 habitantes, y en otro escalón desde los 150.000 hasta los 600.000 habitantes. Y al revés, discriminar negativamente el crecimiento urbano e industrial de ciudades de más de un millón de habitantes.

La sostenibilidad de las sociedades, pasa por la sostenibilidad de las ciudades.

27.2.17

Urbanismo de hace 1.900 años. Mismas necesidades

Décimo Junio Juvenal fue un poeta romano que vivió entre los siglo I y II de nuestra era, y que sobre todo es conocido por sus poemas, sátiras, ampliamente estudiados. Pero hoy vamos a dejar un texto en el que se refiera a la forma de vida en una ciudad romana. Vamos a observar en estas pocas líneas, que sus deseos, lo que para él era un lujo urbano, no difiere tanto de lo que seguimos considerando un lujo en la actualidad.

Vivir en un adosado, con un jardín pequeño, alejado del ruido y los atascos, y con agua suficiente para regar con poco esfuerzo. Has pasado 1.900 años y ahora tenemos wifi. Pero los deseos reales de felicidad siguen siendo la calma, la paz interior, la tranquilidad y el contacto con la naturaleza.

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Si podeis hacer frente a la perspectiva de renunciar a los juegos públicos, comprar una casa de propiedad en el campo. Lo que os cueste. No ascenderá a más de lo que pagais aquí por una renta anual, por una miserable buhardilla mal iluminada.

Con un jardín añadido a la propia casa y un pozo con una alberca poco profunda, que os evitará extraer y acarrear agua cuando vuestras plantas necesitan ser regadas.

El insomnio causa más víctimas entre los romanos enfermos, que cualquier otro factor o dolencias más comunes, como la acedia y las úlceras contraídas por el exceso de comer.

¿Cuantos de entre vosotros, os pregunto, podéis conciliar el sueño en vuestro alojamientos? Dormir toda la noche de un tirón. Y eso es lo esencial del problema, que solo es privilegio de los ricos.

El ruido ensordecedor de los carros atravesando esas estrechas y serpenteantes calles, las blasfemias de los carreteros atrapados en un atasco del tráfico, esto solo, bastaría para sobresaltar al más amodorrado de los manatíes del Emperador, desvelándolo para siempre.

Sátiras de Juvenal.

Humanizar las ciudades es quitarle violencia y molestias

Las ciudades son el elemento de vida más importante que conocemos. Las personas vivimos en las grandes ciudades. Por eso legislar para la amabilidad de las ciudades, para el sosiego, para la humanización de las urbes, es fundamental, pues de esa forma garantizamos que la mayoría no viva subyugada por unas minorías que abusan de las libertades de todos. Puede parecer un discurso carca, conservador, retrógrado, y eso es uno de los problemas de los que somos progresistas, que en muchos casos hacemos caso a las minorías simplemente por ser minorías, sin atender a las razones de que a veces no tienen razón.

La saturación de bares en ciertas calles de las grandes ciudades hay que legislar con mano férrea. Son en primer lugar negocios que buscan más negocio a costa del acercamiento de otros lugares similares. Unos atraen clientes de los otros. Más clientes, más ganancia o beneficio para los locales. Pero los vecinos de esas calles tienen los mismos derechos cuando menos, que los usuarios de las calles llenándolas de ruido, olores o molestias, fuera de horario normal.

Si en dos calles, se producen más de 200 denuncias en un año, algo hay que modificar. Si un local de copas recibe un total de 55 denuncias en un año, algo estamos haciendo mal todos, pues a partir de la denuncia número seis deberían haber saltado las alarmas.

Ruido muy alto, excesivo aforo, bebidas en la calle, menores tomando alcohol,vasos de cristal en la calle, horarios no respetados, violencia, suciedad excesiva, uso de los portales como mingitorios o como zonas de sexo, música excesiva, falta de licencia de apertura, cambio de propietario o de responsable con una asiduidad tremenda para que nunca haya alguien a quien reclamar legalmente, empresas sin registrar, peleas, violencia verbal contra los vecinos, etc.

Las ciudades deben cuidar estos abusos, más si se producen entre las calles de barrios residenciales. Y si no se puede actuar con celeridad, hay que cambiar las leyes con urgencia. Cualquier calle de cualquier ciudad debe ser un lugar para la convivencia. Sin restar un ápice a la libertad de empresa o individual de divertirse como se desee. Pero siempre compatibilizando la humanización de las calles, barrios y ciudades. El resto es NO gobernar. Y no tiene nada que ver con ideologías.

Urbanismo simétrico y repetitivo

Una piscina pública en cada esquina
Estas tres imágenes son de una misma ciudad española. Curiosas formas geográficas de urbanismo engañoso, pues parece lo que no es. Cada vecino de estas casas adosadas creen que la suya es única, es diferente, es “la suya”. Y ese tiene que ser el éxito del hogar, creer que es el tuyo y el único.

Pero la realidad nos enseña que es todo artificial, que se han creado centenares de casas iguales como fichas realizadas en una máquina de piezas iguales, en horizontal en vez de en vertical, atendiendo a que el terreno era barato en la afueras de una gran ciudad.

Una avenida de servicios en el centro
Los servicios comunes son escasos y lejanos. El uso del coches es imprescindible. Más bien de los coches, pues al menos se deben tener dos para poder funcionar con una cierta libertad. Comprar el pan, ir a la farmacia o tomar un refresco en el bar, requiere unas distancias que casi todo el mundo que habitan estas islas artificiales, recorren en su propio vehículo. Es urbanismo artificial, que se diferencia en el color del coche en la puerta, o en los cuadros de la pared. Todo es impersonal, pues los vecinos más que acompañar, molestan con sus ruidos o sus olores, sus humos o sus estridencias. No hay esa vecindad típica de quien en horizontal parecería más fácil de relacionarse con sus cercanos. Sucede en muchos de estos espacios adosados artificiales.

Una gran plaza y parque central y un Centro Comercial a la derecha
Estamos hablando de una ciudad cercana a Madrid pues su distancia es tan solo de unos 14 kilómetros. Hablamos de Getafe, que con unos 180.000 habitantes es mucho más grande que muchas capitales de provincias españolas. ¿Este es el urbanismo que deseamos para nuestras ciudades?

26.2.17

Pablo Ráez. Ejemplo de optimismo ante la lucha

Tras dos años luchando contra la leucemia, ayer 25 de febrero se apagó la luz de la esperanza del luchador Pablo Ráez. Tenía 20 años y desde hacía meses  a través de las redes sociales, concienciaba a la sociedad de la importancia de donar médula ósea para salvar vidas de otras personas, enfermas como él.

La verdad es que el proceso de aféresis o extracción de células madre no es apenas doloroso, sí es cierto que terminas cansado, pero con la satisfacción de haber hecho algo bueno por la sociedad.

El ejemplo de vida que dio Pablo Raéz, mostrando sus cicatrices, su estancia hospitalaria, transmitiendo vida en cada mensaje que nos ponía en redes, ha calado hondo en la sociedad, multiplicando de forma considerable las donaciones de médula ósea en nuestro país.

Pablo fue tratado con quimioterapia, y posteriormente se le trasplantó médula de un familiar, pero diez meses después de este episodio, la enfermedad volvió a aparecer. Debido a este revés, fue ingresado nuevamente en noviembre de 2016, para un nuevo trasplante.

Siempre sin perder la sonrisa, mandando mensajes de apoyo —aunque supongo que interiormente no estaría tan animado— Pablo Ráez fue un chaval de 20 años que en más de una ocasión nos emocionó a todos, y a mi me recordaba algunos episodios vividos junto a otros luchadores a los que vi vencer la batalla.

Tal vez sea la experiencia personal, aquello que me hace escribirle unas líneas ahora con más energía vital, pues cuando supe la noticia de su fallecimiento apenas lo podía creer. Pablo tenía una vida por delante, y a pesar de su juventud, nos ha dejado un legado tremendo, frases que calan hondo, y una ilusión por vivir increíble.

Sigamos donando, dejando un poquito de todos nosotros para salvar vidas. Seguro que es lo que él querría ver. Gracias por tu ejemplo y por mostrar la enfermedad como es, sin filtros.

Donde estés…, Simplemente gracias.

Laura Puente Ajovín

Gimnasios al aire libre o Street Workout en Zaragoza

Las zonas verdes cada vez más se utilizan para realizar ejercicios y gimnasia al aire libre. Un uso muy recomendable, la capacidad de oxigenarse es mayor, como lo es la de disfrutar con el ambiente que nos rodea. Pero los ayuntamientos deben poner fácil ciertas prácticas, a través de reglamentos o de equipamientos no siempre caros, que facilitan el uso y la práctica de la gimnasia para todas las edades.

Ahora está de moda montar pequeños elementos de madera para practicar lo que algunos llaman “street workout” y que traducido es simplemente ejercicio al aire libre. Ejercicios diversos adaptados a diversas edades y a diferentes capacidades. Hasta ahora era normal encontrar en algunos parques de barrio herramientas estáticas para que practicaran pequeños ejercicios las personas de la tercera edad, pero cada vez es más normal que se vayan montando gimnasios estáticos para la práctica de calentamientos y ejercicios de mediana potencia. Un paso más, muy positivo, pues tras los niños y la tercera edad, también los adultos deben poder practicar al aire libre, con estructuras acordes.

Urbanismo de la pobreza y la riqueza

Hay muchas clases de pobreza, aunque menos que clases de riqueza. Y curiosamente y en contra de lo que sé que pensáis la mayoría, hay muchas personas que desde dentro de la riqueza no están bien y desearían (o logran) salir de ella, y al contrario muchas personas que desde la pobreza no quieren salir de ella y la prefieren a otra situación.

Aquí es donde entra la primera duda ¿qué es la pobreza y la riqueza social, personal, colectiva, real? ¿Es siempre la pobreza sinónimo de desgracia y la riqueza de éxito y felicidad?

Si medimos la pobreza o la riqueza por nuestra capacidad de adquirir, nos estamos equivocando. Decimos algunos que no es más rico quien más tiene, sino quien menos necesita. No hay que ser asceta, pero tal vez más austero en estos tiempos de consumismo desaforado.

En las sociedades más pobres, en relación siempre con los datos estadísticos de las más ricas, hay personas que disfrutan de una gran felicidad. Y en las sociedades ricas, incluso opulentas, hay personas que están muy descontentas con su vida, y que desean cambiar y no siempre pueden, de su condición social.

Creemos que dejar de ser rico es muy sencillo. Bastaría con dejar “de tener”. O incluso con tener pero no emplear, no consumir, no utilizar. Pero sabemos y conocemos a jóvenes a los que les cuesta mucho empezar un vida a su gusto, desde situaciones de riqueza. No tienen libertad para decidir, pues los condicionantes les “obligan” a mantener las apariencias y los estatus sociales. Tanto en clases medias como en clases altas.

Y sabemos y conocemos a sociedades pobres, incluso muy pobres, que no admiten ayudas o cambios en sus estructuras sociales, pues no les representan más felicidad. Es pues todo muy relativo, y si se intentan resolver problemas, hay que dejarse atrás los concepto con los que cargamos como mochilas y tal vez plantearnos que nada es estático ni está compartimentado en bloques estancos.

A la hora de hacer urbanismo esto es muy importante. El urbanismo se realiza para llenarlo de personas. Sin estas, nada de lo que se realice servirá para nada. Aunque sea precioso, carísimo, muy útil, moderno o en línea con lo que se hace en otros lugares. La sociología es imprescindible para saber trabajar el urbanismo con la única variable que sirve. “Que sea aceptado y utilizado por la sociedad”.

Pero claro, si nos basamos tan sólo en eso, nunca cambiaríamos nada. Incluso los errores urbanos, tras ser aceptados, tampoco se podrían cambiar. Y aquí es donde entra la mezcla de psicología social, sociología e inteligencia emocional, urbanismo y arquitectura, para saber darle la vuelta a los problemas, sin crear otros nuevos. Siempre existirá una tensión, para hay que analizarla antes de ques e produzca y conocer y planificar sus posibles soluciones intermedias.

Por suerte llevamos más de un siglo analizando problemas y comportamientos sociales, y curiosamente, se repiten ante problemas que a veces nos parecen diferentes pero que no lo son. Por eso hoy tenemos más facilidad para no equivocarnos a la hora de diseñar propuestas, ideas, cambios o nuevos urbanismos totalmente diferentes.

22.2.17

Parece una calle…, y sí, es una calle de plástico

Parece una calle porque es una calle. Parece un barrio extraño porque también lo es. Son decenas de calles de plástico, todas paralelas, llenas de plantaciones de verduras para los mercados europeos. 

Dentro de estas calles hay también salas para dormir o descansar, pequeñas zonas para ducharse o ir al baño, zonas de convivencia para cuando se acaba el trabajo y todxs están rendidos o derrotados. 

Una pequeña localidad de plástico como muchas de Almería donde viven y conviven, mal viven e intentan mejorar, decenas de personas. Siempre son personas, trabajadores baratos para que el precio se los productos encaje entre los beneficios de los propietarios de la tierra de estos pueblos de plástico. 

No, no hay parques.

Nota.: La imagen NO es del autor del blog, es de una exposición sobre inmigración de CentroCentro.

Avenidas verdes para evitar el ruido de los coches

Esta imagen no dice nada, pero representa una herramienta muy utilizada en las grandes ciudades para evitar ruidos. Es una pantalla natural a modo de parque que separa en tres alturas distintas y con tres caminos que discurren a lo largo, una gran autopista de un barrio residencial. 

En esta caso es la continuación del parque de la Fuente del Berro en Madrid, en lo que han llamado Parque Sancho Dávila y que separa la M30 de unas zonas residenciales en el barrio de Las Ventas y Fuente del Berro

Estos 40 a 50 metros de "calles" verdes con grandes árboles hacen que esta zona verde absorba el ruido, parte de la contaminación, y se logre separar visualmente lo que debe ser una zona tranquila de otra totalmente artificial. 

Pero también tiene un uso callado pero bastardo. Es una reserva de espacio por si en un futuro la autovía rápida necesita crecer en más carriles, dejando sin efecto sus diseños útiles para el barrio.  En estos tiempos esto sería casi imposible por la presión vecinal en ciudades con sistemas democráticos de defensa, pero no es así en ciudades déspotas.


21.2.17

Troncos viejos de árboles en segunda actividad. Madrid

Con los troncos de los árboles muertos se puede hacer algo más que serrín. Esta imagen es del parque de La Fuente del Berro en Madrid. En el camino que lleva a los juegos infantiles han preparado con troncos secos esta composición artística que termina con una frase que os dejaré en la siguiente entrada. 

Ahora no voy hablar de arte urbano en un camino, sino de la utilidad de unos troncos viejos para que los niños jueguen de otra manera menos convencional. Es posible trabajar con buenas ideas y pocos presupuestos, en las zonas verdes urbanas.



20.2.17

Brotes verdes nuevos que anuncian la primavera

Vuelve la vida natural y de forma natural, vuelve la esperanza del verde nuevo, los parques se nos van llenando poco a poco de nuevas hojas, de brotes verdes, de esa realidad natural de que vuelve esa primavera que empieza siempre antes de marzo, para decirnos a los vecinos que se acaban los días grises, apagados, lluviosos y que nuestros parques esperan el color

19.2.17

Espacio lúdico y deportivo para la tercera edad


En los pequeños parques de barrio es habitual poner espacios a modo de juegos deportivos para personas mayores. Este ejemplo se puede ver en la zona del Picarral de Zaragoza, pero existen en muchas ciudades españolas. Con un solo elemento se pueden realizar hasta 13 ejercicios diferentes para las personas de la tercera edad, para brazos, pies, manos, brazos y cintura. Sin duda una excelente forma de aprovechar los espacios con una inversión pequeña en un solo elemento.


10.2.17

Con la Sanidad no se miente. Que te ponen muy malito

No es cierto esto que presenta aquí la viñeta, nunca ha estado esperando una cama de hospital dos personas a la vez. A lo sumo una persona, aunque haya estado muchas horas e incluso días. Tampoco hay que exagerar. Dos personas nunca. Y mucho menos sentadas. Si hubiera dos personas esperando, solo hay sillas para una de ellas, el otro tendría que estar de pie.

8.2.17

Talleres autoempleo "Acción contra el Hambre"

Con la ayuda de Zaragoza Activa, la ONG “Acción contra el Hambre” ha creado unos talleres formativos gratuitos para el autoempleo, dirigido en este caso concreto a mujeres inmigrantes. El objetivo de estos cursos es fomentar el emprendimiento personal, la autoestima, los potenciales de cada persona, la motivación de sus cualidades para lograr sacarles de su situación muchas veces de baja autoestima pero no de capacidades. Se enseña a desarrollar las ideas propias, a darles formas rentables, que se puedan vender y comunicar a los futuros clientes, que sean proyectos capaces de salir de su interior personal, para hacerlos negocio.

Son tres jornadas seguidas con los talleres que os dejamos en la imagen, no tanto con la intención de que os apuntéis, como con la intención de que aprendáis qué vais a necesitar preparar en vuestra formación, para lograr el autoempleo, en línea con lo que se considera básico, tanto para mujeres como para hombres, tanto para emigrantes como desempleados.

A partir de estos conocimientos muy básicos, es desde donde debéis avanzar y empezar a construir vuestra idea, para lograr que sea rentable y creáis vosotros en ella sin fisuras.

Sociología de la pobreza y sus características

El antropólogo americano Oscar Lewis estudió la pobreza desde una óptica dura, a veces mal entendida, anticipándose de alguna forma al sentimiento social actual, el de una parte de la sociedad occidental que entiende la pobreza como una responsabilidad compartida entre los gobiernos, la sociedad y los propios actores que no desean salir de su situación. Nadie quiere ser pobre, pero es cierto que algunos colectivos no desean abandonar con facilidad sus costumbres sociales, que forman parte ancestral de sus experiencias vitales durante siglos.

No todos los colectivos sociales desean vivir como sedentarios, y ante el nomadismo hay como en casi todo, clases económicas que saben vivir con una calidad o con otra, su particular manera de “estar” en la sociedad. Se puede ser nómada y lleno de lujo, o ser nómada desde la más absoluta pobreza.

Pero volviendo a la pobreza y a los rasgos que según Oscar Lewis, caracterizan la cultura social de los colectivos más desfavorecidos, vamos a realizar un listado de esas características que a veces parece más unas marcas sociales que unas realidades, pero que se mantienen por diversos motivos entre las clases con menos recursos.

  • Lucha constante por la vida, por sobrevivir
  • Periodos vitales alternativos entre ocupación y desocupación
  • Odio a la policía y a los gobiernos de todo tipo
  • Desconfianza casi total a la justicia, teniendo la suya propia
  • Bajos ingresos, se dediquen a un trabajo o a otro
  • En casi todos los casos, desafección total hacia la religión
  • Fuerte orientación hacia vivir el presente, sin planificar nunca el futuro
  • Actividades laborales, productivas o culturales muy primitivas y básicas
  • Ausencia de ahorro en cualquier periodo de su vida
  • Falta de dinero en efectivo y gasto según sus ingresos
  • Ausencia de reservas alimenticias en sus hogares
  • Compras constantes en pequeñas cantidades de alimentos
  • Uso del empeño de ropas, joyas y objetos, como modo de financiación
  • Tendencia a solicitar préstamo a usureros
  • Uso de objetos, ropas, muebles, vehículos, etc. de segunda mano
  • Unas relaciones familiares y de pertenencia, muy altas
  • Un machismo y patriarcado muy profundo

Estos rasgos sociales no se dan sólo en el colectivo más conocido como podrían ser los gitanos, es también común en colectivos cerrados de pobreza o incluso son rasgos que se amplían entre las personas que se quedan orilladas en una sociedad cada vez más dura y que más personas aparta hacia la pobreza. Son rasgos de autodefensa en muchos casos, pero que a veces les aúpan a más pobreza todavía. La formación y educación en estos colectivos es fundamental, para que no queden atrapados en esta espiral.

7.2.17

Urbanismo nómada de caravanas buscando trabajo

Con el nombre de "Circo Internacional" hemos visto pasar por nuestras ciudades numerosos espectáculos, mayores o menores, de más o menos calidad en el espectáculo. Estas caravanas estacionadas temporalmente en el barrio de las Delicias de Zaragoza, junto al antiguo Cabezo de Palomar, nos muestran la imagen de lo que sería una ciudad nómada, que intenta sobrevivir con sus espectáculos, con el trabajo que mejor saben hacer.

Es el concepto de el nomadismo emigrante laboral, que sin un lugar fijo para poder vivir y trabajar, se movía entre ciudades europeas buscando fiestas o momentos de vacíos de entretenimiento urbano, para poder recoger unos dineros que les permitiera seguir viviendo y viajando. Urbanismo efímero, nómada como existió durante muchos siglos en todo el mundo, de forma indigna, pobre, donde cada personaje del circo ejercía varios trabajos de todo tipo. incluso los caballos eran los motores del transporte o los actores de algunos ejercicios cirquenses.

Eran varios matrimonios de nómadas gitanos húngaros y yugoslavos, que con sus hijas e hijos, conformaban esta bohemia y pobre caravana que ofrecía itinerantes espectáculos con orquesta, gimnastas, alambristas, equilibristas, antipodistas, y trapecistas. Curiosamente ejercía de director un gitano nacido en Orense. Esta imagen es del año 1970.

Urbanismo de la pobreza más indigna en Zaragoza

Este urbanismo fue de España, una dura imagen de un suburbio de Zaragoza del año 1964. Media siglo ha pasado, poco más de 50 años es lo que diferencia a las ciudades españolas de otras ciudades del mundo más pobre. No es tanto. Hoy parece impensable que estas imágenes se vuelvan a producir en España, pero en falso. Siguen existiendo los asentamientos de pobreza extrema, por mucho que se intentan evitar. Asentamientos con las mismas realidades sociales, con idénticos problemas.

La inmigración de la pobreza es una realidad que (casi) siempre va unida en sus dos conceptos. Inmigración y pobreza. Y el inmigrante cuando tiene que huir de su propio territorio es por la condiciones de vida, intentando buscar zonas mejores. Y como nunca es aceptado (aunque a veces lo parezca) se agrupan entre ellos formando asentamientos, barrios pobres que se transforman en más pobres, junto a problemas de limpieza, sanidad, indignidad, inseguridad, desempleo.

Esta imagen es del fotógrafo aragonés José Antonio Duce, reflejando lo que fueron las famosas graveras del barrio de La Paz. Un espacio vacío, aledaño a un barrio de emigración rural hacia la capital. Durante años aquel asentamiento casi en su totalidad de personas de etnia gitana vivieron en condiciones indignas en un gueto al que casi no podía entrar ni la policía. La solución vino con el traslado de aquellas familia a otro asentamiento más digno dentro de la extrema pobreza y los concpeto equivocados del urbanismo válido. Y se creó el poblado de Quinta Julieta que simplemente trasladó los problemas un par de centenares de metros, hacia barracones prefabricados en vez de casetas de obra. Aquella solución también hubo que destruirla tras buscar la solución lógica de intentar poco a poco una integración, con la mediación y negociación con las familias más integradas.

Y surgieron unos edificios en un barrio de Zaragoza, donde se trasladaron estas familias a viviendas nuevas y de calidad, mezcladas con familias zaragozanas a las que se les facilitó una vivienda nueva. Incluso se acompañó el trabajo social de algunas familias voluntarias que se fueron a vivir a esas comunidades de vecinos, para desde dentro templar problemas.

6.2.17

Grupo cerrado Francisco Caballero de Zaragoza

Este ejemplo de urbanización cerrada es de la ciudad de Zaragoza, junto a la calle Luis Vives, llamado “Grupo Francisco Caballero”. Unos bloques de viviendas con siete décadas de vida, edificados en la zona en expansión de aquellos años, junto al Parque Grande José Antonio Labordeta, que han aguantado muy bien el paso de los años, con reformas y cuidados de sus comunidades de vecinos, hasta tener hoy unos excelentes ejemplos de urbanización cerrada de alta calidad, ya casi en la zona mejor de la Zaragoza actual, con zonas verdes interiores muy cuidadas, edificios de poca altura donde se puede convivir de forma cerrada dentro de una gran ciudad.

Tuvieron su origen en un concurso nacional convocado por el Ayuntamiento de Zaragoza en 1940 para la construcción de viviendas protegidas en una de las manzanas provenientes de los terrenos de la SZUC, para construir viviendas en régimen de protección, por lo que quedaría bajo la supervisión y aprobación del Instituto Nacional de la Vivienda.

Al concurso concurren proyectos firmados por arquitectos de reconocida valía en la ciudad, pero se elige y premia el plan presentado por dos jóvenes arquitectos zaragozanos con poca experiencia profesional previa: Alejandro Allanegui Félez (titulado en 1934 y muy vinculado a Regiones Devastadas) y José de Yarza García (titulado en 1933). La construcción del grupo de viviendas se realiza entre los años 1942 y 1945.

Los arquitectos proyectan 113 viviendas a partir de cinco tipos basados en tres modelos diferentes, con dos grandes patios interiores y una arquitectura semiabierta con facilidad para interactuar desde la casa a la calle. Las viviendas se diseñan como uso para una familia con hijos como módulo (la “Ley de protección a la vivienda” obligaba a ello). Como consecuencia, la vivienda más pequeña incluía, además de cocina, comedor y aseo, un dormitorio de matrimonio (capaz para contener una cuna) y dos habitaciones más para los hijos (cada una con capacidad para dos camas individuales).

Las viviendas se realizan con materiales modestos, y con servicios en los bajos como tiendas de proximidad de lo más básico, en una zona que estaba bastante despoblada en aquellos años, junto a los jardines interiores a modo de ocio y zona de juegos para niños. 

El segundo aspecto relevante es comprobar cómo en el proyecto están muy presentes los principios de vivienda mínima (en cuanto a condiciones de orientación, distribución o infraestructuras básicas) defendidos por el racionalismo constructivo.

En total el grupo proyectado era capaz para dar alojamiento a 794 personas, aunque nunca llegó a ocuparse completamente. La adscripción de las viviendas siguió un orden de prioridades que daba preferencia a los funcionarios del Ayuntamiento y de otras instituciones, quienes fueron los beneficiarios mayoritarios. La adjudicación se llevó a cabo mediante el sistema de venta, llegándose a acuerdos con la Caja de Ahorros de Zaragoza para que facilitase los préstamos necesarios a los nuevos propietarios.

Uno de los aspectos más atractivos del diseño de la manzana proyectada por Alejandro Allanegui y José de Yarza es su concepción a base de tres grandes bloques en L que se combinan de manera que generan dos patios interiores de diferente tamaño y comunicados entre sí, tanto para el acceso como para facilitar que los niños puedan ser vigilados en sus juegos desde las propias viviendas.

Al interior de los patios se accede a través de tres arquerías situadas entre los bloques de viviendas, solución que hace ganar en comodidad y en intimidad el funcionamiento de la vida diaria de los vecinos.

Las noticias positivas, vuelven a triunfar. What's Working

Hay un movimiento denominado What's Working (Así Sí), del Huffington Post, que busca publicitar las noticias positivas, buenas, capaces de hacer creer que las soluciones todavía son posibles, en un mundo que siempre prima lo negativo, lo catastrófico, sobre la normalidad y lo habitual. Podríamos estar ante un movimiento que buscara lo positivo para ser más felices, sin restarnos capacidad de crítica dura, pero sin tener que sufrir con noticias de sangre y dolor sobre todo a las horas de las comidas en familia.

Es posible que los medios de comunicación vivan desde hace un siglo de las malas noticias, pero las personas en cambio vivimos de las buenas nuevas, de las normalidades, de lo positivo. Pero aun así hemos hecho creer posiblemente con razón a todos los medios, que es imposible para ellos vivir de las noticias positivas o normales, que se necesita carnaza y sangre, dolor y molestias, para que alguien compre o consuma la comunicación.

Luego en cambio, en la redes sociales triunfan los vídeos de niños o perros, de personas guapas que hacen humor, de erotismo o gastronomía, de viajes o de paisajes, de animales o de atardeceres. Igual estamos cambiando en nuestra forma de creer en las noticias y todavía no lo han detectado los medios de comunicación.

Agua con limón, para empezar el día

Lo sabemos aunque no siempre actuamos así por las mañanas. La mejor bebida para empezar el día es un vaso de agua con zumo de limón. Nada más levantarnos, antes de desayunar, para que empecemos el día con efectos beneficiosos para la digestión, la piel, el sistema inmunitario, la concentración o la pérdida de peso. Te ayuda a tomar agua para la deshidratación de la noche al estar varias horas sin tomar líquidos, te aporta vitaminas y minerales, siempre que te lo tomes nada más exprimir el medio limón en un vaso de agua de unos 250 c.c.; y te ayudará a que el desayuno posterior se pueda digerir mucho mejor pues inicia el proceso de bilis del sistema digestivo.

Cuida los niveles de insulina, ayuda a eliminar mejor las posibles toxinas de la noche, limpiando mejor el hígado, ayuda en el estreñimiento, ayuda en el sistema inmunológico, aporta energía natural, rejuvenece la piel, despierta la mente ante el nuevo día, y limpia la boca de bacterias evitando la sequedad bucal antes del desayuno.

El único posible problema en algunas pocas personas, es que produzco acidez estomacal. Si es así, con dejarlo de tomar por las mañanas se resuelve el asunto, pero no es habitual. Intenta aunque no es lo mismo, con naranja o mandarina, o cambiarlo por un té verde.

5.2.17

La felicidad laboral y personal es productiva

Desde la Universidad de Navarra, la psicóloga y escritora María Jesús Álava Reyes, que impartió una conferencia bajo el título 'La felicidad productiva', nos manda un mensaje muy claro y contundente. La felicidad de los trabajadores puede aumentar hasta un 30% su productividad. Es pues una buen inversión procurar que los trabajadores de las empresas estén felices sus horas de trabajo, crean que forman parte de una comunidad que procura su felicidad, y que el éxito es algo que deben todas las partes buscarse por igual, como elemento positivo y productivo.

La señora Álava señaló con claridad que: “…la felicidad es la que provoca el éxito, y no al revés.La clave está en una buena combinación entre la gestión de las operaciones  con eficiencia operativa, y la gestión de las personas buscando su felicidad profesional“.

María Jesús Álava Reyes preguntó: “¿por qué a la hora de escoger entre los candidatos no interesa saber si son felices o no; y nos centramos fundamentalmente en otro tipo de competencias?. Sabemos que el impacto que en un equipo tiene una persona alegre, vital, feliz, motivante, es fantástico, ya que generalmente es gente que busca soluciones, creativa y resistente a la frustración. El impacto que esto tiene en la empresa y en la productividad de ésta es enorme”.

Quiso también hacer una distinción entre el estrés positivo, “aquel que nos estimula, nos ayuda y empuja a mejorar”, y estrés negativo, que es el que “nos impide descansar, nos produce ansiedad, nos puede llegar a bloquear y tiene manifestaciones, incluso físicas, como la falta de sueño, sudoración o taquicardias”.

Consejos para ser más felices
  • Afrontar la vida con optimismo. Lo importante siempre es la actitud.
  • La comunicación es clave. Comunicar bien los temas importantes.
  • Controlar nuestro estrés y dejar de sufrir inútilmente o asumir las consecuencias.
  • Ser asertivos, pero no agresivos.
  • Ante la adversidad, capacidad de reacción e inteligencia emocional.
  • Cuando analicemos un hecho, recordemos que hombres y mujeres somos diferentes.
  • Ser creativos. Cuando todo parezca perdido, usar la imaginación.
  • Potenciar nuestro sentido del humor.
  • Aprender de experiencias difíciles.
  • Aprender de los niños, ellos tienen una lógica maravillosa.

Nota.: Esta información proviene en parte del Diario de Navarra.