Según se acercan las elecciones municipales de finales de mayo —un solo mes nos separa— los sondeos se vuelven más tercos en lo imposible. Ya son varios los que nos muestran un panorama curioso. Un empate maquiavélico entre los cuatro partidos que dominan la carrera. ¿Acaso es que no se atreven los que hacen los sondeos, en decirnos quien va en cabeza?
En el último —de Simple Lógica— leo que el PP y Podemos sacarían un 21,3%, el PSOE llegaría a un 21,1% y Ciudadanos se quedaría con un 20,8%. Parecen resultados de brujos. Es cierto que bajan a niveles normales el voto a “otros”, que vuelve a perder otro punto IU y se mantienen bien los nacionalistas vascos y catalanes, a los que no parece afectarles la entrada de los nuevos.
¿Pueden ser ciertos estos datos? ¿a dónde nos conducen? Sin duda no parecen datos fáciles de asegurar, lo normal es que en estas cuatro semanas algo se mueva, sobre todo pensando en la irregular implantación territorial de los nuevos partidos y sus candidaturas. Pero todo se estudiará a fondo para saber de qué manera los votos municipales se pueden extrapolar a unas generales.