El diario ABC dentro de su enorme
libertad de opinión ha publicado un hermoso reportaje sobre Yanis Varufakis, el
nuevo ministro de economía de Grecia. Estos del ABC son simpáticos a la vez que
manipuladores de escuela de preescolar. Ni para los suyos sirven, joroba.
Les debe joder tanto una serie de
arquetipos que ellos entienden nunca deben tener las gentes de izquierda, que
sin darse cuenta se les va de las manos la crítica infantil. Son tantos años de
diario conservador, que al menos deberían tener un cierto respeto hacia lo que
representan.
No debe tener un político o un militante
o un ciudadano de izquierdas nada que no sea mugre y pobreza; imposible tener
un piso cojonudo, un ordenador Apple, una biblioteca poblada, un compañero de
vida simpático, unas copas de cava llenas de líquido fresco, una camisa de
moda, tres platos juntos de comida y ensaladas.
Somos muchos los que diciendo que somos
de izquierdas tenemos coche y piso, incuso algunos tienen apartamento en la
playa o en la montaña, muchos somos los que comemos pescado de vez en cuando e
incluso alguna vez jamón de Teruel. También bebemos vinos Borsao o de Miedes e
incluso alguna vez Viñas del Vero. Yo he tenido la suerte de conocer a
empresarios comunistas y socialistas y os juro que sabían sonreír. Ellos no se
sentían mal teniendo una pequeño empresa donde trabajaban como el que más.
Incluso estamos gentes de izquierda que entramos en las iglesias, que tenemos
amigos curas, que nos duchamos casi todos los días, que leemos o vamos al
teatro a ver clásicos y no solo a ver los perros flautas modernos que son el
azote cultural de esta España rancia que nos domina. Conozco a gente de izquierdas
que llevan a sus hijos a la escuela concertada aunque la inmensa mayoría
siempre hemos apostado por la escuela pública, e incluso me han dicho que hay
al menos uno de izquierdas que usa un teléfono iPhone pero esto está sin
confirmar. Hay gente de izquierdas que prefiere ir antes a Londres o New York
que a Moscú o a Tirana, que si van a Toledo son capaces de entrar al Museo del
Ejército sin armarla, que saben distinguir entre un buen queso curado de uno de
marca blanca, que llevan décadas usando ordenadores MAC sin que hayan perdido
no un ápice de su crítica social por los que abusan de las sociedad más débil.
Incluso muchos de nosotros nos hemos casado por la iglesia y tenemos parejas
hermosas con las que hacemos el amor, pues sin que lo sepan los conservadores
del ABC, los de izquierda también follamos. Eso si, como los animales pues
tenemos rabo largo y peludo junto al culo y nos molesta. Efectivamente, el rabo
lo tenemos en los dos sexos, pero solo los de izquierdas.