Como amigo este blog de analizar los ejercicios
de comunicación política, debo reconocer que pocos discursos en los últimos
meses —por no decir años— han sido tan de libro, tan bien estructurados, tan de
estadista popular y populista, tan beneficiosos para sus propias ideas, que el
realizado por José María Aznar ayer en la Convención Nacional del PP.
Aznar ha vuelto aunque él diga que no,
sabiendo que cambia sus palabras para seguir estructurando un nuevo proyecto. Ha
vuelto sin saber tan siquiera si le van a dejar entrar, pero ha vuelto
hablando, explicando, diseñando el futuro que ellos ven para España, empleando
la pedagogía política y social aunque sea la suya, diseñando un diagnóstico de
España y del Partido Popular y lo que es más importante recetando todo un gran
listado de fórmulas magistrales para curar los trastornos y las enfermedades más
graves.
Queda claro que a Aznar le creerán de
entrada solo parte de los suyos, otros desde dentro ya le odian desde hace
tiempo, y que su discurso solo busca amplificarse para que cale en la sociedad
que lleva años escondida en la miseria y sin oír un discurso conservador que
sirva para algo. Ha vuelto Aznar con todas las de la Ley y espera que los
gritos de los medios le reclamen como el Gran Salvador. Solo remarcar dos
frases que harán las delicias de los actuales dirigentes del PP que se están
rascando las legañas para despertarse.
“¿Dónde está el
Partido Popular?”
“¿Aspira
realmente el Partido Popular a ganar las elecciones?”
Pero Aznar no solo da consejos al Partido
Popular y a toda España. Bueno es él como para quedarse solo en eso, tras saber
—e insistir sin que se note— que la filosofía Popular pasa por ser el “Padre” protector que
ayuda a todos los que tienen problemas desde el orden y la Ley. Suena
cojonudamente pero es la filosofía que sirve para que los ricos sean más ricos
y los pobres más pobres, no hay que caer en las trampas filosóficas bien
diseñadas desde hace siglos. Todo esto es de libro, de Primero de Políticas.
Pero sigamos.
También dio diagnósticos para la
izquierda en plan “consejo” y como amigo y deseoso de tener rivales dóciles contra los que
ganar. Y nos mostró su idea de lo que realmente sucede en la izquierda, que viniendo
de él resulta además de bastante cierta, para coger con detenimiento y hacerla caso. Y
no lo digo con sarcasmo.
“¿Quién ofrece
para España un proyecto creíble, en el que confiar y que pueda ser útil? No lo
tiene la izquierda que está dividido en tres: los que han decidido hundir su
propio barco, los que están en la inopia y lo populistas. A todos se les cayó
encima el Muro de Berlín y a algunos se les va a caer ahora los cascotes del
fracaso del chavismo”
En realidad en esta frase está contenido
todo el mensaje de ataque que el Partido Popular va a dirigir contra la
izquierda española en las próximas citas electorales. ¿Sabremos desde la
izquierda defendernos?