En el espacio temporal de una semana los sondeos en España
se han vuelto locos. Y ambos desde empresas serias. Desde el CIS o desde
Metroscopia han presentado resultados tan dispares sobre la intención de voto
que o bien los españoles nos hemos vuelto locos, o pasamos de responder o las
cocinas de los sondeos son tan excesivas que se pasan de rosca.
Asumimos como posibilidad que tras la elección de Pedro
Sánchez los españoles hayan entendido que ahora si, el PSOE es la leche natural
y entera. Bien pero no quiero pensar qué hubiera sucedido si hubieran elegido
de verdad a un líder con fondo y no solo con forma. Pero eso no explicaría del
todo ni la subida de un 50% del voto en el PSOE, pasando del 21,2% al 31,7%,
10,5 puntos que parecen excesivos para seguir creyendo. Pero es que incluso el
PP sube un 2,3% siendo que sube su contrincante natural, pues al resto los
españoles no entienden que sean alternativa, según responden reiteradamente en
el mismo sondeo.
El caso de Podemos es curioso. Pasan del 15,3% al 10,7%
desinflando toda posibilidad. Algo que también sucede en IU y UPyD. Traducido a
Diputados el cambio sería mucho mayor que un 50% de voto diferente. ¿Quién se
equivoca, los españoles en las respuestas, quien las tabula o quien las cocina
hasta hacerlas tan diferentes? En el caso de UPyD pasa del 5,9% al 3,3%; pierde
un 44% del voto del CIS en solo un par de semanas. ¿Tanto le afecta a UPyD que
hayan elegido a Pedro Sánchez? Jodo. Qué suerte han tenido en el PSOE
encontrando a su mirlo blanco.
