Muerto Mandela, muy posiblemente se haya cerrado definitivamente la puerta casi atrancada del siglo XX. Era un líder de cuando era posible tenerlos en el mundo, con poder o con fuerza, con razones o con razón de libertad.
Mandela era un símbolo para el mundo, alguien que en el siglo XXI no encajaba bien pues ahora está de moda ser gris. No solo salvó a su país y a su sociedad, salvó a la razón y a la lógica del futuro. ¿Quien queda con su importancia global?