Yo he vivido periodos donde poder encontrar un diseñador gráfico con experiencia era una tarea dura para terminar quitándoselo a la competencia o recurrir a tus contactos empresariales o formativos hasta lograr alguien con conocimientos en artes gráficas.
Parece increible pero se veía venir por varios motivos. Exceso de mala formación, autoempleo tirando los precios y el respeto de la profesión, infravaloración del trabajo bien realizado, bajada de sueldos lo que llevaba a buenos profesionales a cambiar de oficio o a entrar en los mercados oscuros de las no cotizaciones, competencia de mercados emergentes que a través de internet diseñaban desde la lejanía para España a precios de churro, etc.
El diseñador desesperado y desempleado tendría treintaymuchos, tuvo que conocer buenos tiempos si se dedica a su oficio desde siempre. Ahora nos toca la crisis incluso para las personas que tienen profesiones.
¿Se estará dando cuenta la Formación Profesional reglada de estas realidades para tomar decisiones?