Tras las palabras de Pablo Crespo, exsecretario de
Organización del PP en Galicia, diputado y empresario imputado en la Trama Gürtel
se ha lucido hoy en el programa “Salvados” de La Sexta.
Sus palabras sobre la corrupción política en el PP no son
nuevas, tampoco lo son que todos los partidos políticos y empresas que trabajan
para contratos públicos se manejan entre los mismos parámetros ilegales. Ni que
los políticos cobren en dinero negro. Nada de lo dicho nos suena a nuevo, pero
nunca lo habíamos visto en directo, con calma, después de cenar, con
contundencia por parte de uno de los implicados.
Y no ha dicho nombres, no ha dado pistas, no ha entregado o
enseñado pruebas. Pero dice tenerlas.
Esto mismo si sucediera en la inmensa mayoría de los países
democráticos del mundo mundial, mañana dimitirían varios políticos y el resto
se pondrían a llorar. En España mañana no pasará nada. Bueno si, se criticará a
Crespo por ser un vil, algo que también sabíamos.
Todo parece una trama perfectamente tejida para que nunca
suceda nada por parte de nadie.
Hoy he escrito una entrada en otro blog sobre un asunto
parecido, antes de saber que se iba a hablar de esto. ¿Por qué nadasirve nunca de nada en España?