19.10.13

No sé escaparme a una isla desierta


Todos tenemos alguna vez la sensación de que nuestra salida es escaparnos hacia una isla desierta, abandonando la tranquilidad fingida. 

Pero si nos llevamos todas las mochilas anteriores, las negativas también aunque no las sepamos detectar, aunque construyamos un castillo en la nueva isla, será un edificio de barro y se hundirá a pocos que sople el viento. 

Escaparse a una isla supone empezar de nuevo, sin cargas mentales. ¿Estás dispuesto, sabes hacerlo?