4.7.13

Los Golpes de Estado siempre son una mala solución, aunque los pidan los Premios Nobel


Tras el golpe de Estado en Egipto queda claro que recurrir a los militares es una mala solución, siempre. Es increíble que incluso Premio Nobel de la Paz esté de acuerdo en que los militares se hagan con el poder en un país que había votado democráticamente un sistema de gobierno. Quien gobierna con las urnas como garantía, debe perder el poder con las urnas. Y para ello deben servir los sistemas democráticos. Si no somos capaces de dotar al sistema de defensa contra los sátrapas o usurpadores, hay que modificar las normas, pero nunca desear que sean los militares los que resuelvan los problemas, pues ellos solo lo saben hacer de una forma.

A veces se disfrazan de recambios, de dimisiones forzadas y de poner en los poderes a civiles resabiados y que odian. Así es imposible resolver los problemas de ningún país.

¿Alguien cree que Egipto saldrá de este problema con la intervención militar? Yo no y por desgracia simplemente hay que esperar.

Morsi lo hizo mal en su año de mandato, potenciando solo a los musulmanes con cambios en leyes fundamentales. La sociedad presionó en la calle hasta lograr que Mohamed Morsi se encerrara en su enroque particular en otra visión cegata de la realidad política. Al final con el aplauso de muchos los militares han ejercido lo único que saben hacer bien en países como Egipto. Dar un golpe de Estado  e intentar que todo vuelva al lugar que ellos quieren que esté Egipto. Es complicado entender a Egipto y más resolver sus problemas ancestrales casi. Por eso los militares serán incapaces de sembrar paz.