José María Aznar dijo ayer lo que muchos en el PP esperaban
de él: 'Cumpliré con mi responsabilidad, mi conciencia, mi partido y mi país'.
Tiembla Rajoy, que te viene “La Bicha” y se te va a llevar
de un soplido, lo asegura él mismo antes de soplar.
Habla de rebajar impuestos “YA” y de reformar la política
fiscal para no seguir atacando a las clases medias, es decir, un regalo a los
odios de los grandes dignificados tras los trabajadores desempleados. Se está
preparando la cama de forma clara y tajante. Habla para los suyos y para sus votantes.
Pero no fue claro ni tajante, simplemente lo dejó caer, en
busca de amigos y amiguetes. Hoy se leerá muy bien los periódicos y las
crónicas de los amigos periodistas en busca de gasolina. Ahora toca ver sus próximos
movimientos tras recoger la cosecha de sus palabras.
Siempre ha pensado que él desearía ser el Primer Presidente
de la III República más que de un nuevo Gobierno en crisis. Y que si siguen metiéndose
con sus políticas y su familia, sus amigos y acciones anteriores, saldrá del
cajón y se comerá a bocados a todos los del PP que salen sonriendo junto a
Mariano. Es lo que veo y siento.