De Chipre dicen que tenía
un Plan B, pero es tan simple que no encaja entre las soluciones. Ahora baraja
la opción de no quitarles ahorros a los que tengan menos de 100.000 euros en
sus cuentas. ¿Es posible?, pues con arreglo a lo que les exige la Unión Europea,
no será suficiente para cubrir las exigencias.
Europa le demanda
a Chipre 5.777 millones de euros propios, para que la UE decida prestarles
10.000 millones. Pero de esos más de cinco mil millones que tienen que recaudar
o “sisar” Chipre, 2.100 millones corresponden a ese 6,75% del impuesto a las
cuentas con menos de 100.000 euros.
Incluso las
cuentas que tienen menos de 20.000 euros aportan a ese bolsa común de apaños
sisados un total de 1.246 millones. Muchos millones para condonar su robo, sin
otras subidas o diferentes alternativas.
Curiosamente
el 42% del total de los depósitos que tienen los bancos chipriotas están en
cuentas con más de 500.000 euros. Jope. Es decir, del total de depósitos que se
calcula en un montante total de más de 68.000 millones, casi 30.000 millones
están en cuentas con más de 500.000 euros. Cuentas bancarias de personas con
muchos ahorros, que buscaban esa rentabilidad entre el 7% y el 8% que ofrecían
en sus cuentan unos bancos que ahora están entrando en la espiral del infierno.
Gran parte de ellos de ciudadanos rusos que empleaban Chipre como un lugar
simpático para esconder.
Para poder
restar de la quita planteada, a los ahorradores con menos de 100.000 euros en
sus cuentas, solo es posible aplicando un impuesto del 15% a todos los que
tengan más de 100.000. O un 12% a las cuentas entre 100.000 y 500.000 euros y
un 16% a las de más de 600.000 euros. Malas soluciones.
La imagen que
acompaña la entrada, de Nicosia, es del
fotógrafo Simon Dawson.