Es gracioso leer el informe que ha realizado el Instituto de
Estudios Económicos (IEE) —una especie de “amiguetes” de la organización
empresarial CEOE— para el Gobierno de Rajoy, aunque lo disimulen. Y no, no soy
catalán, solo empleo el sentido común.
Hablan de que Cataluña caería en el abismo, perdería un 20%
de su PIB, ciento de miles de nuevos desempleados, un 50% menos de
exportaciones a Europa y España, una inflación superior al 20%, y a tener que
pagar Cataluña casi 100.000 millones de euros a España por las infraestructuras
creadas en Cataluña. Jodoooo.
Está feo ¿mentir?. Muy feo. Y decir medias verdades, es
decir solo la parte que interesa, es mentir.
Podemos pedirle a Cataluña el coste del AVE, como se pone de ejemplo. Sí, se podría pedir. En la misma medida en que Cataluña independiente puede cortar el AVE justo en su frontera de Lérida. España ya no podría salir a Europa con el AVE. Ni con las carreteras del Mediterráneo. Qué gran oportunidad para defender la TCP por Aragón ¿no? Y si pensamos que tras Cataluña podría ir al mismo paquete el País Vasco, solo se podría salir a Europa desde Aragón. Jope. ¿Seguimos presionando con políticas absurdas que solo nos llevan a la violencia grave, muy grave?
Claro que en contrapartida Cataluña podría pedir a España
una parte del material militar que es de todos. Y una parte de toda la
estructura estatal que hay que Madrid. Una parte por ejemplo del edificio del
Congreso ¿no?. Y una parte de las pensiones futuras para los jubilados
catalanes, pues han cotizado para la hucha común de todos. Y una parte de la
sanidad futura pues también han cotizado los trabajadores catalanes para la
hucha común de la SS. Si pide España el coste del Aeropuerto del Prat, lo
catalanes pueden pedir la parte proporcional de Barajas, del de Castellón, del
de Zaragoza o del de Huesca. Y del AVE a Sevilla que se hizo con dinero de
todos, también de los catalanes.
Y sobre los mercados, las exportaciones, Europa y esas cosas
de economía y negocios, añadir solo un tema pequeñito. A Europa le interesa
hacer negocios con Cataluña. Incluso es posible que más que con una España sin
Cataluña ni el País Vasco. Para saber qué haría Europa habría que escuchar a
Europa después de una imposible independencia de Cataluña por mucho que se
empeñe en ello el Partido Popular con sus soflamas e intentos absurdos de
evitarla. Y mucho dudo si Europa no sería si no el primero si el segundo, que
aplaudiría a una Cataluña independiente y con ganas de vender y comprar.
No, no nos preocupemos tanto por la falta de dinero de
Cataluña, en serio. El dinero se fabrica o se pide. Para lo primero hace falta
un Gobierno y una imprenta. Para lo segundo un banco.