8.9.12

Aprendizaje 2.0 o algunas soluciones para el desempleo juvenil en España

Cuando el SMI mensual era en España de 3.600 pesetas (21,64 euros) yo entré a trabajar de aprendiz ganando 1.760 pesetas (unos 10,5 euros). Eran los primeros años 70, efectivamente. Y al aprendiz con 14 años le pagaban en Artes Gráficas (que es donde yo empecé y terminé) un 48.5% del SMI mensual de entonces.
Ahora se vuelve a hablar de rescatar el aprendizaje 2.0 para intentar que los jóvenes entren en la empresas mejor formados y abandonen el desempleo, mezclando ideas del aprendizaje viejo con lo que ya se está haciendo desde hace muchos años en Alemania con el beneplácito de los sindicatos alemanes.
SEAT que ha instaurado uno de los primeros intentos, va a pagar un 39% del SMI actual a sus aprendieses alumnos de primer año en una FP reformada. Teniendo en cuenta que en mis tiempos las 9 horas diarias eran de trabajo y ahora las 8 horas serán repartidas al 50% entre clases teóricas y prácticas en taller, no me parece mala cantidad, si la compara proporcionalmente con aquellos años.
Que la F.P. actual no funciona en España ya lo he dicho en este blog (y en charrada.blogspot.com) varias veces. Y siempre he avisado que lo que yo decía sonaba a barbaridad pues todos aseguran lo contrario. He sido durante algo más de una década tutor en prácticas de alumnos que venían de la FP de Grado Superior o Medio, depende de años, y sé por eso lo que me digo. Efectivamente hay FP que SI funcionan bien y otras que son un pequeño desastre. Culpa de muchas situaciones formativas que habría que reformar.
No es lógico que la inmensa mayoría de profesores de F.P. sean maestros que se reciclan a sus respectivos oficios profesional, o profesores que han estado muy poco tiempo trabajando en los respectivos oficios que enseñan. El mejor fontanero debe ser quien enseñe fontanería a los jóvenes.
No está bien que se hagan tan pocas prácticas en empresas y que además se hagan en una sola, pues vician la visión del oficio.
No es correcto la (a veces) mala utilización de las nuevas tecnologías más modernas, por desconocimiento de su empleo por parte de algunos profesores.
No está bien que no se estén constantemente adaptando los ciclos formativos a la realidad laboral del mundo que en cada año vivimos. Se instaura un ciclo de una rama determinada, y se mantiene así con pocos cambios mientras los mercados evolucionan a una velocidad de vértigo a veces. La FP no tiene nada que ver con la ESO
No está bien que digamos que hay una alta contratación laboral en F.P. (cuando se contrataba a trabajadores, antes de la crisis, no ahora) pues siendo verdad era mentira y se sabía. Existían muchos contratos nada más acabar las prácticas, que se suspendían a los pocos meses por diversas causas. No era ni mucho menos lo mismo el número de contrataciones iniciales, que el número de personas que continuaban en el oficio a los dos años de terminar los Ciclos de FP. En algunos centros se hacía un seguimiento de la vida laboral de los alumnos que salían pero en otros muchos no.
La calidad profesional de los alumnos que terminaban los ciclos era según los empresarios, muy baja.
Y no es lógico sobre todo en los Ciclos Medios, que a los alumnos se les haga una FP con criterios escolares, en los institutos de los que ellos mismos en muchos casos han huido, y no se empleen criterios laborales.
Por último, no es lógico que no se den suficientes clases de autoempleo, de creación de empresas, de motivación, de formación continua, de reciclaje, de economía empresarial, de trato con clientes y proveedores, etc.
En Alemania llevan muchos años con parte de las F.P. en manos del Ministerio de Trabajo y no en manos del Ministerio de Educación. En Alemania (que ahora está de moda) hay donde elegir y donde pelear para encontrar diferentes calidades y caminos laborales. Pero si no nos gusta Alemania, hay otros muchos países con criterios parecidos a los que aquí expongo. Y efectivamente algunos otros con criterios más academicistas como en España. Pero tener más de un 52% de jóvenes en el desempleo nos debería hacer plantearnos serias reformas.